El presidente de la Xunta en funciones y candidato del PP a la investidura, Alfonso Rueda, ha cerrado su discurso definiéndose como un «caminante al lado» de Galicia y se ha comprometido a «dar todo» para que la comunidad «siga superándose».
«Cuando no nos ponemos límites los gallegos somos imparables. Pido su confianza para seguir por ese camino», ha aseverado Rueda en el final de su discurso de investidura pronunciado en la mañana de este martes en la Cámara gallega.
Rueda, que ha reivindicado el legado de sus predecesores en el cargo y también ha elogiado la labor de oposición como factor que ha contribuido al desarrollo de Galicia, ha dedicado el tramo final de su discurso a dibujar la «Galicia del futuro» que quiere abrir para la próxima década.
En ella, el candidato a la investidura ha apelado a caminar hacia lograr una Galicia «más igualitaria» para lo que ha subrayado la necesidad de mantener «la lucha sin cuartel» contra la violencia de género.
Además, ha apelada a mantener «las puertas abiertas» de Galicia para seguir recibiendo visitantes, «potenciar» la proyección de la lengua y la cultura gallega o avanzar hacia una justicia «más ágil y mejor dotada».
Así las cosas, ha subrayado que no entiende el resultado del pasado 18 de febrero como una «carta blanca» para actuar durante los próximos cuatros años pero que velará por que la acción de gobierno no se aparte del «interés supremo» de Galicia.