La Federación olívica de asociaciones de madres y padres del alumnado de Vigo y comarca (Foanpas) ha denunciado este martes la «situación límite» que viven muchos centros escolares de la zona por la falta de recursos: «No se puede recortar donde ya no hay».
En rueda de prensa, la presidenta de la asociación, Iria Salvande, ha criticado el «recorte importante» de profesorado que han sufrido ciertos colegios e institutos.
Así, ha explicado que algunos centros cuentan con un solo orientador para más de 800 alumnos, mientras que los especialistas de Pedagogía Terapéutica (PT) y Audición y Lengua (AL) para niños con necesidades especiales en varios casos están itinerando entre dos centros con más de 50 kilómetros de distancia, por lo que disponen de menos tiempo para atención.
«Hay muchas quejas. Hablamos con la Delegación Territorial y siguen sin solventarse», ha reivindicado Salvande, quien ha puesto el foco en la «sangrante masificación» de ciertos institutos, que no cuentan con el profesorado suficiente para dar la mejor educación posible.
También se ha referido a las infraestructuras de los colegios, que en muchos casos tienen más de 50 años y necesitan inversión. En este punto, ha hablado de varios muros de carga de las fincas de los centros, que están vallados por sus problemas estructurales, por lo que no se permite a los niños acercarse a ellos ante el riesgo de caída.
Uno de los puntos que más preocupa a Foanpas es el caso concreto del CEIP Igrexa Candeán que, tras la jubilación de una docente, se suprimió esa plaza, sin que fuese publicado en el Diario Oficial de Galicia (DOG) ni fuese informada la dirección del centro. Fue el pasado jueves, 7 de septiembre, cuando la Consellería avisó a la directora, Asunción Portela, de que esa plaza no se iba a cubrir, tras sus reclamaciones.
Precisamente Portela ha criticado esta situación, ya que el centro ya había hecho toda la organización contando con esa plaza, debido a que en todos los documentos oficiales aparece como que continúa activa.
Ahora, se han visto a modificar en dos días todo lo planeado desde junio, por lo que la propia dirección y los especialistas tienen que asumir en conjunto una tutoría, reduciendo el nivel de atención a los alumnos.
«Se trata de un colegio pequeño con mucha diversidad. El hecho es que los políticos alardean de la atención a la diversidad, pero al reducir puestos, no podemos dar esa atención correctamente», ha apostillado.
BECAS COMEDOR
Por otra parte, desde Foanpas también han insistido en pedir al Ayuntamiento de Vigo que gestione cuanto antes las becas comedor del alumnado, para evitar la situación del año pasado, cuando se retrasaron meses, por lo que las familias se vieron obligadas a pagar hasta diciembre, cuando se concedieron y se les devolvió el dinero (en su caso).
Según Salvande, el problema está en que muchos padres y madres no son capaces de hacer frente a ese adelanto de dinero. Asimismo, algunos de ellos no mandan a los niños al comedor por la incertidumbre de que si no les conceden la beca, no podrán pagarlo durante todo el año.
«No entendemos que esto no esté solventado a 1 de septiembre. Al menos saber quiénes van a estar bacados y quiénes no. Ni siquiera hay previsión de cuándo se sabrá», ha sentenciado, recordando la polémica de años anterior.