La Xunta ha abierto un expediente sancionador a un trabajador de la Diputación de Lugo porque el pasado sábado «prohibió el acceso» de los agentes medioambientales, que dependen de la Administración autonómica, a las obras en el aparcamiento del Centro de Artesanía e Deseño (Centrad).
En concreto, los agentes intentaron acudir al lugar en varias ocasiones para comprobar la tala de unos árboles centenarios en el entorno del Fogar de Santa María acometida desde el sábado.
Se trata de una actuación autorizada por la Diputación y que, tras una denuncia de Ecoloxistas en Acción Galiza Atlántica e Verde, investiga el Juzgado de Instrucción número 3 de Lugo, que ya solicitó informes a la Policía Nacional y al Seprona, tal y como confirman a Europa Press fuentes judiciales.
El pasado mes de mayo, la Dirección Xeral de Patrimonio Natural de la Xunta había paralizado esta actuación en el antiguo hospital por constatar que había presencia de nidos y restos de huevos en estos árboles situados donde está proyectado un aparcamiento con 165 plazas, en una zona cercana a la Muralla.
Ahora, la Diputación acometió esta tala –desde primera hora del sábado– y, pese a que avisó el viernes por la tarde –el día 18– a la Delegación Territorial del Gobierno gallego, por su horario de verano no fue hasta el lunes cuando se leyó dicha comunicación.
Así, los agentes medioambientales intentaron acudir el sábado a las obras, pero un trabajador de la Diputación lo impidió, motivo por el cual ahora se le ha abierto un expediente.
La Xunta entiende que es una «infracción grave» del artículo 122 de la ley gallega de patrimonio natural, que recoge «la desobediencia a las órdenes o requerimientos del personal inspector (…) en el ejercicio de sus funciones de protección de espacios naturales y de la flora y fauna silvestres regulados por la presente ley, así como la obstaculización de dicho ejercicio».
Según relata la Administración autonómica, los agentes del distrito IX se encontraron el sábado con la negativa a su requerimiento de entrar a las obras en Centrad. Tal y como explican en la denuncia, el vigilante de las instalaciones «llamó al responsable de seguridad en la Diputación, el cual le negó telefónicamente a los agentes la entrada al recinto».
Asimismo, estos hechos se volvieron a repetir el lunes, día 21, hasta que finalmente pudieron acceder acompañados por un inspector de la Policía Nacional. No obstante, ya no pudieron verificar la existencia de árboles con posible nidificación, porque la tala había concluido.