La Xunta ejecutó 126 millones de los denominados fondos Next Generation en 2021, el 26,2% de los créditos existentes en ese ejercicio, según figura en el informe de la Conta Xeral de ese año publicado por el Consello de Contas este viernes.
Al respecto, la Xunta justifica estas bajas tasas de ejecución en el «tardío» reparto de los fondos acordado por el Ministerio de Hacienda a ls comunidades, con la necesaria tramitación de las modificaciones presupuestarias a lo largo del último semestre, lo que dejó «escaso margen» de actuación a los órganos gestores.
El informe de Contas apunta que la Xunta percibió 539 millones correspondientes con los fondos REACT-EU y los fondos del Mecanismo Europeo de Recuperación y Resiliencia (MRR), a partir de los que habilitó créditos en el presupuesto de gasto por 480,5 millones, con la citada ejecución de 126 millones.
Desagregados estos fondos por mecanismos de financiación, la ejecución de la Xunta de los REACT-UE fue del 27,6% (117,4 millones) y de los fondos del Mecanismo de Recuperación fue del 15,77% (8,68 milllones).
RECOMENDACIONES FONDOS EUROPEOS
Por su parte, en un informe paralelo sobre fondos europeos, Contas realiza diferentes recomendaciones. Se apunta al retraso global del marco financiero 2021-2027, por lo que se apuesta por reforzar la dotación del personal que participa en la tramitación y por adoptar medidas de simplificación administrativa para «acelerar» la ejecución.
También se aboga por adaptar la estructura organizativa de la Xunta para obtener la mayor rentabilidad posible. Pide prestar especial atención a las secciones que presentan «peores rateos» de ejecución.
Igualmente, se propone que el Sistema de Información de Xestión Contable da Xunta de Galicia (Xumco) incorpore el DNI o CIF de todos los beneficiarios de fondos europeos.
Contas también recomienda «un mayor impulso» a la colaboración con entidades locales para que «participen en mayor medida en la gestión de los programa europeos e instrumentos financieros» como los Next Generation. Se busca «maximizar» el empleo de recursos en favor de vecinos y tejido productivo local.
Además, propone que «deberían impulsarse y primar» aquellos proyectos que tengan «acreditada su eficacia en su gestión y ejecución». Para lo cual se apela a emplar indicadores para el seguimiento de incidencias y evitar atrasos.