Los sindicatos del metal de la provincia de Pontevedra mantienen el pulso a la patronal este jueves en la quinta jornada de huelga convocada con motivo del bloqueo en la negociación del convenio provincial del sector.
Desde media mañana miles de trabajadores recorren las calles de Vigo en una nueva marcha de protesta que finalizará a las puertas de la planta viguesa del grupo Stellantis. Los manifestantes corean de nuevo consignas como «somos trabajadores y no esclavos» o » si el IPC sube los salarios también».
Los responsables de los distintos sindicatos han advertido de que «a la patronal se le acaban las excusas» y han instado a los representantes de las empresas a volverse a sentar para desbloquear las negociaciones, eso sí, «sin condiciones».
Así, han insistido en que las demandas de los sindicatos no son desproporcionadas y han subrayado el éxito en el seguimiento de la huelga, secundada «de forma voluntaria y sin incidentes».