El alcalde de Santiago, el socialista Xosé Sánchez Bugallo, ha asumido su derrota al quedar el PSdeG-PSOE como tercera fuerza en la capital gallega –hace cuatro años, había sido la primera– y ha avanzado que no asumirá el acta de concejal el 17 de junio.
Eso sí, ha apelado al resto de fuerzas de izquierdas a dar a la capital gallega «un gobierno progresista» que ahora está llamado a liderar la candidata del BNG, Goretti Sanmartín, tras quedar como segunda fuerza con seis concejales, los mismos que los socialistas pero con más votos.
Bugallo ha asumido su «total, absoluta, única y exclusiva responsabilidad» por esta derrota. Ha comparecido en torno a las 22,30 horas de la noche sin admitir preguntas de los periodistas y delante de los rostros serios de los miembros de su candidatura y equipo, que lo han arropado en la sede de campaña situada en rúa Xeneral Pardiñas.
Inicialmente, el alcalde tenía previsto seguir el escrutinio desde este local, pero a última hora de la tarde –cuando, a la vista de las últimas encuestas, era palpable el sorpasso del BNG– se decidió que él y su equipo lo haría desde la ‘Casa do Pobo’, en Ramón Cabanillas.
Bugallo ha arrancado con agradecimientos a los compostelanos una intervención que, desde el inicio, ya sonaba a despedida. La primera vez que se hizo con el bastón de mando fue tras la dimisión del también socialista Xerardo Estévez, en 1998.
Desde aquel año, consiguió revalidar como alcalde en tres ocasiones (en 1999, en 2003 y en 2007) y se mantuvo en el puesto hasta 2011, cuando el PP alcanzó la mayoría absoluta. Ocho años después de su marcha, en 2019 se volvió a poner al frente de la candidatura del PSdeG-PSOE y ganó los comicios con 10 ediles, lo que le permitió gobernar en solitario, buscando apoyos puntuales en Compostela Aberta –con la que sumaba mayoría absoluta– y en el BNG.
«Fue un honor servir a Santiago», ha expresado Bugallo, quien también ha hablado de un «cambio político importante» en una ciudad que «abre una nueva etapa». «En la que yo ya no estaré», ha reconocido a continuación, para explicar su voluntad de no tomar posesión del acta de edil en la Corporación que se conformará el 17 de junio.
Por tanto, aunque continuará presidiendo las juntas de gobierno y ofreciendo ruedas de prensa como regidor, ha confirmado que será «el 16 de junio» cuando dará por finalizado su mandato. A partir de entonces, estará «siempre a disposición de los compañeros y del gobierno municipal, sea este del color político que sea».
Ante la previsión de que la nacionalista Goretti Sanmartín le suceda como alcaldesa, para lo cual tendrá que contar sí o sí con los votos del PSOE y de Compostela Aberta, Bugallo no ha admitido preguntas de los medios de comunicación pero no ha pasado por alto la mayoría de izquierdas que queda en la Corporación.
«Espero que la mayoría progresista, que queda claramente consolidada, se refleje en un gobierno progresista para Santiago», ha recalcado. En caso de que no haya acuerdo entre las tres fuerzas de izquierdas, el bastón de mando recaería en Borja Verea, al haber sido el PP la lista más votada.
