La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, ha urgido al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que se «paralicen los vertidos de 4 millones de metros cúbicos» de aguas contaminadas a la ría de Muros-Noia.
Pontón ha mantenido este martes una reunión con representantes de la Plataforma contra los vertidos de la mina de San Finx. «Después de la multitudinaria manifestación en la comarca de Muros-Noia, que se llevó a cabo en febrero, el Gobierno del PP sigue haciendo oídos sordos y vemos que ya empezaron las obras para llevar a cabo el vertido», ha denunciado la dirigente nacionalsita.
Así, ha advertido de que se está llevando a cabo «una acción que puede tener un efecto devastador sobre la actividad pesquera y marisquera de un ecosistema único», del que viven «miles de familias», mientras que «el PP del señor Rueda le permite a una multinacional seguir adelante con unos planes de vertidos que representan un atentado medioambiental».
Frente a ello, el BNG se muestra «firme» en su posición y manifiesta todo su apoyo al sector pesquero y pide a Rueda «que deje de poner los intereses de una multinacional con sede en Australia por encima de los intereses de miles de familias que viven de la pesca y marisqueo».
El BNG ha reivindicado que «se sitúa siempre al lado de las personas, colocándolas en el centro de sus políticas». Por eso, manifestó a los representantes de la plataforma que estarán a «su lado» para defender su derecho a vivir de su trabajo».
Pontón ha insistido en que el PP «tendría que tener la decencia política de defender Galicia». «Rueda tiene que gobernar de una vez para la gente», ha aseverado, además de alertar ante una «bomba medioambiental».