Un congreso aborda desde este lunes en Santiago el «reto» de conseguir una inteligencia artificial que se base en comportamientos «éticos», al tiempo que analiza casos de éxito de la aplicación de esta tecnología en algunas empresas.
El encuentro lo promueve IndesIA, que es la asociación que han creado Repsol, Gestamp, Navantia, Técnicas Reunidas, Telefónica, Microsoft, Ferrovial, Airbus e Inditex.
De ámbito nacional aunque con vocación europea, esta asociación tiene por objetivo promover el desarrollo de las empresas en el ámbito de la digitalización y su transición hacia una cultura ‘data driven’.
En la inauguración, el conselleiro de Facenda, Miguel Corgos, ha defendido un trabajo «colectivo» en la aplicación de las tecnologías inteligentes a la industria, por su «complejidad» y los «retos éticos y normativos» que se presentan para su uso, que, según ha incidido, requieren la colaboración de las administraciones públicas, las universidades, la sociedad y las empresas.
Hace menos de un mes, también coincidiendo con la participación del conselleiro en un acto sobre inteligencia artificial en la Cidade da Cultura, la Xunta anunció que regulará su uso en el sector público autonómico, de acuerdo con los resultados del informe elaborado por las tres universidades públicas gallegas sobre el marco ético y normativo para el desarrollo de esta tecnología.
Este lunes, Corgos ha vuelto a advertir la necesidad de que haya «fiabilidad» y ha resaltado los principios del «humanismo» que guían la estrategia del Gobierno gallego en este ámbito.
A IndesIA la ha erigido, mientras, en un «modelo de trabajo colectivo y de colaboración bienintencionada para dar valor al conjunto de datos» que manejan sus socios.
LA AESIA
A continuación han intervenido el presidente de la asociación, Valero Marín, y el director de la Axencia Galega para a Modernización Tecnolóxica (Amtega), Julián Cerviño, quienes han sido interpelados por la moderadora sobre la Aesia (la Agencia Española de Supervisión de Inteligencia Artificial), cuya sede se ubicará en A Coruña.
Ambos han apostado por «esperar» para «ver cómo se traspone» la normativa comunitaria, y Cerviño ha indicado que esta agencia «va a ser un foco para otro tipo de perfiles que son imprescindibles» en «temas de derecho y filosofía, sociología, etcétera».
«Todas las tecnologías cambian, pero la inteligencia artificial nos abre un horizonte que hasta ahora no era viable y una dimensión ética que es imprescindible», ha dicho.
Además, el director de la Amtega ha considerado que Galicia «puede ser una referencia no solo a nivel TIC sino también a nivel del ámbito normativo y ético».
Por su parte, Valero Marín ha indicado que este es un «debate complicado» ya que «es muy difícil legislar y poner puertas al campo».
En este sentido, se ha referido a «voces» que abogan por «poner ciertos límites o frenar determinados desarrollos que se han presentado recientemente en el mercado».
«Es algo muy complicado. Es algo que tiene que desarrollar la Unión Europea», ha proseguido, antes de asegurar que «todas las empresas en general» tienen «conductas éticas», si bien en Europa «hay ese miedo sobre si los algoritmos están funcionando basados en comportamientos éticos o no».
Por eso, ha añadido, «va a ser complicado legislar y conseguir un marco de actuación que evolucione a medida que lo hace la tecnología, porque va de forma exponencial». Pero «la Unión Europea lo tiene claro y toca trasponer y ser promotores y saber educar a la ciudadanía», ha concluido.
EJEMPLOS
A continuación han conversado con la directora general de IndesIA, Nuria Ávalos, responsables de Gestamp, Pablo de la Puente, y Navantia, Donato Martínez, sobre el estado de la situación de la industria gallega y la implantación de la inteligencia artificial en la cadena de valor industrial.
Martínez ha explicado que en Navantia la inteligencia artificial tiene «dos focos», por un lado en el producto, «muy focalizado en los buques para la Armada y otros clientes» y por otro en la «mejora de procesos» como la eficiencia energética y la sostenibilidad.
De la Puente se ha referido a la recogida de señales y datos y también a la aplicación para la planificación de la producción, en el campo de la automoción.