El Ayuntamiento de Santiago ha rendido homenaje este sábado a los periodistas Diego Bernal López y José Luis Rey-Alvite con la instalación de dos placas conmemorativas.
La primera, en la rúa do Vilar, 70, donde nació Diego Bernal; y la segunda, en el arco de la Praza de Mazarelos, lugar en el que transcurrió la infancia del periodista compostelano.
Autoridades, familiares y compañeros de los periodistas asistieron en la mañana de este sábado a estos reconocimientos, respaldados por la Asociación de Periodistas de Galicia (APG) y el Ayuntamiento de Santiago.
En primer lugar, se descubrió la placa en honor a Diego Bernal, «periodista que encarnó el alma de la Compostela que sintió como corazón de Galicia, en la que dejó el poso de su saber en cada calle, cada esquina y cada piedra».
Sobre él, Xosé Sánchez Bugallo ha asegurado que era «compostelanismo puro y duro» y ha recordado que Santiago «lo reconoció dedicándole una calle y ahora colocando esta placa».
«Fue un inmenso premio conocerlo y ahora tenemos que conseguir que las generaciones del futuro se pregunten quién era Diego Bernal», ha manifestado.
Asimismo, Nieves Bernal, una de las hijas del periodista, ha reivindicado la figura de su padre con un repaso de su vida y obra. «Sus amores fueron la agencia y Santiago», ha recordado.
ALVITE, «UN MUNDO SINGULAR»
A continuación, en el arco de Mazarelos se descubrió la placa homenaje a José Luis Rey-Alvite, que recoge: «En esta plaza transcurrió la infancia y buena parte de la vida del periodista compostelano José Luis Rey-Alvite Martínez (1949-2015) que desde las ‘Historias del Savoy’ fabuló sobre situaciones y gentes que retrataron un mundo singular».
El hijo de Alvite, visiblemente emocionado, ha agradecido este reconocimiento y ha señalado que su padre, «donde esté, estará sacando una sonrisa de satisfacción sabiendo que esta plaza, que tanto significó para él, tiene una placa con su nombre».
Del mismo modo, el alcalde de la capital gallega ha destacado que Alvite «enriquecía la vida» de todos los que lo conocieron, así como «la vida de la ciudad».
«En el Santiago de hoy me cuesta encontrar personajes de ese tipo. Esa relación tan personal ya es más difícil. Me parece adecuado recordar su vida, pero también que nos sirvan de referencia», ha subrayado.