El Consello de la Xunta ha aprobado nueve concentraciones parcelarias en siete municipios que reorganizarán más de 8.900 hectáreas y beneficiarán a unos 5.600 propietarios.
En concreto, entas concentraciones se realizarán en: Montes de Fao e Novefontes (Touro), Lamas-Loureda-Sergude-Vigo (Boqueixón), Herbón (Padrón), Freixeiro (Santa Comba), Castenda (Tordoia), Baltar-Golán-Grobas (Melide) y las de Arcillá-Bestar-Vilar-Sisoi, Lamas y Roás (las tres en Cospeito).
De ello ha informado el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, quien destaca la concentración parcelaria como un «instrumento fundamental» para el desarrollo del agro gallego, puesto que permite reducir costes a explotaciones, fijar población y prevenir incendios.
Desde 2021 se han decretado 27 nuevas concentraciones, mientras que con estas nueve se llegará a la reordenación de 22.589 hectáreas, más de 100.000 parcelas y 15.387 titulares.
Al respecto, Rueda subraya la «fuerte» inversión en este ámbito, con 118 millones de euros desde 2009, con una partida que se incrementará a 17 millones en 2023 para estos procesos.
AUMENTO DE FACTURACIÓN DE LA CADENA FORESTAL
En otro orden de cosas, el Consello ha evaluado un informe de la Consellería do Medio Rural en el que se constata un incremento en la facturación de la cadena forestal de la madera, que alcanzó su máximo histórico en 2021 con 2.578 millones de euros.
La cifra de 2021 supone un alza del 25% respecto a 2020. Asimismo, se estima que esta facturación alcanzará alrededor de los 2.800 millones en 2022.
El Gobierno gallego se consolida como potencia forestal en España, con el 56% de las cortas de madera a nivel estatal, según datos del año 2020.
La agenda de la Xunta de impulso a la industria forestal-madera contempla un presupuesto de 55,5 millones, con una movilización global de 140 millones de euros.