Más de seis mil personas han acudido esta semana, el martes, al Banco de Alimentos, lo que provoca que se resienta por las reservas de cara al futuro más inmediato.
La presidenta del Banco de Alimentos, Amadora Núñez, ha constatado que ha sido una constante lo de que vaya «muchísima gente», incluso se atreve a destacar que ha sido «increíble».
«No sé qué va a pasar. El martes hubo gente, voluntarios esporádicos y una de esas voluntarias salió de allí llorando», ha expuesto sobre esa masiva presencia que se podría repetir hoy viernes, en esos dos días a la semana que abre.
Tanto es así que calcula que fueron «en torno a las seis mil personas», en las dos sedes con que cuenta este banco, en la ciudad de Lugo y también en A Mariña. «Fueron en torno, o más de seis mil personas, lo que, desde luego, es una auténtica barbaridad. Una verdadera salvajada», ha lamentado Amadora Núñez.
En cuanto a reservas de alimentos, ha puntualizado que «de momentohay», aunque ha reconocido que a este «ritmo se pueden acabar» enbreve. «Yo le pido a la gente que eche una mano, no ya para exquisiteces, sino para contar con arroz, pasta o harina», ha reivindicado, y no tanto leche «porque las empresas lácteas se están volcando», ha agradecido.
Y esta avalancha de personas la atribuye a la inflación «desbocada» y así ha expuesto que «con los precios que tienen en los supermercados, es una auténtica burrada».
Se disparan las cifras en cuanto a demandantes de alimentos, por cuanto el Banco de Lugo solía atender a unas dos mil personas en las dos sedes con que cuenta.