Los profesores interinos que figuran en las listas de contratación de la Consellería de Educación continuarán en ellas aunque no se presenten al próximo proceso selectivo, que tendrá carácter extraordinaria con tan solo 125 plazas por concurso-oposición.
Según fuentes sindicales consultadas por Europa Press, la Mesa Sectorial Docente –con votos a favor de ANPE, CCOO, CSIF y UGT– ha aprobado en la reunión de este jueves la adenda al acuerdo con la Xunta por el trabajo interino, para introducir una disposición transitoria conforme esta oferta pública de empleo (OPE), prevista para 2023, no contará a estos efectos, como ya ocurrió con las de este 2022.
Por parte de CCOO-Ensino, su portavoz, José Manuel Fuentes, lo celebra porque, de no ser así, el proceso selectivo tendría un «afán recaudatorio» al estar obligados los aspirantes a pagar las tasas. Además, dado el carácter de concurso-oposición y el reducido número de plazas, «no habría mucha gente que podría acceder» a las listas.
Con todo, en declaraciones a Europa Press, Fuentes reconoce que «va a haber afectados», por ejemplo todos aquellos aspirantes que hayan acabado la universidad recientemente y que ya en estos momentos no figuren en las listas en vigor desde las últimas oposiciones, celebradas en junio de este año.
Por su parte, el presidente de ANPE Galicia, Julio Díaz, también saluda esta medida que busca «no engañar a la gente pensando que tiene las posibilidades de trabajar» cuando la oferta de plazas es así de reducida.
Sin embargo, no ha contado con el voto favorable de CIG-Ensino, el sindicato mayoritario. Su secretario xeral, Suso Bermello, matiza a Europa Press que no es que no estén de acuerdo, sino que ni la Consellería ni el resto de organizaciones permiten introducir mejoras que ellos llevan «cuatro años proponiendo».
A modo de ejemplo, Bermello expone que está sin modificar en el acuerdo de interinos «una cuestión tan chabacana» como que solo se permite renunciar a las sustituciones –durante un período de tres años– al personal que justifique tener un contrato de trabajo temporal o prestar servicios, también de carácter temporal, en otro puesto del sector público.
«A los que tienen contratos indefinidos, que ahora te pueden echar con nada, no les permiten renunciar», lamenta el representante de la CIG.
También en lo tocante a los interinos, ANPE ha reclamado a la Administración autonómica que convoque cuanto antes la comisión de seguimiento del acuerdo para negociar su adaptación a la ley estatal de reducción de la temporalidad en el sector público. Eso sí, Julio Díaz reclama que se esta modificación mantenga el método gallego de contratación.
CUERPO TÉCNICO DE FP
Otro de los asuntos del orden del día de la Mesa Sectorial ha sido la nueva convocatoria para integrar el cuerpo de Profesores Técnicos de FP (PTFP) en el de Profesorado de Educación Secundaria (PES) por el efecto de la Lomloe.
En este sentido, los sindicatos han vuelto a reclamar un complemento equiparador para evitar la «discriminación» de todos los PTFP que no lleguen a incluirse en el PES por cualquier razón.
Bermello (CIG) estima que sería un aumento retributivo de unos 170 euros brutos y que no afectaría a más de 500 funcionarios de carrera, por lo que tampoco implica una «cantidad astronómica» de recursos.
MODIFICACIÓN DEL CALENDARIO ESCOLAR
Asimismo, tal y como había anunciado el lunes, la Consellería de Educación ha presentado este jueves en Mesa Sectorial la modificación del calendario escolar para recuperar el sistema anterior al curso 2021/2022 por el cual las clases de la tercera evaluación en Educación Secundaria Obligatoria (ESO) finalizaban a finales de junio.
Y es que, tal y como está previsto en el calendario todavía en vigor hasta que se introduzca tal modificación, la Consellería establecía una tercera evaluación antes del 5 de junio, a partir de la cual se realizaría la evaluación final.
Esto significaba, en la práctica, como ocurrió el curso pasado, que los alumnos que hubiesen aprobado todo no darían más materia a partir de esa tercera evaluación. La modificación que ha planteado la Xunta establece que los alumnos tienen derecho a tres sesiones de evaluación parciales y una final, pero dará libertad a los centros para hacer coincidir la tercera con la final, por lo que habrá clases normales hasta el día 22.
Los sindicatos han acogido la propuesta favorablemente, pero con reproches hacia «la forma» con la que Educación lo ha hecho. El secretario de CIG-Ensino ha lamentado que la Administración llegase a la reunión «sin ningún tipo de documento» para las organizaciones. «Lo que hizo fue leer allí, y no es la primera vez que pasa», critica.
Asimismo, Suso Bermello señala que esta modificación, con la que están de acuerdo, llega «tarde» porque los profesores tuvieron que presentar en octubre unas programaciones teniendo en cuenta que las clases finalizarían a comienzos de junio. Más allá de esta cuestión, la CIG también ha reclamado «reforzar las plantillas».
Desde ANPE Galicia, Julio Díaz también celebra la modificación del calendario porque así lo había pedido el sindicato el curso anterior: «Ya habíamos dicho que no podíamos tener dos semanas a los chavales sin avanzar en la materia». Eso sí, ha coincidido en criticar «las formas» y la falta de «planificación» con la que la Xunta ha presentado este asunto.
Por su parte, José Manuel Fuentes (CCOO) lamenta tener que conocer por los medios de comunicación una nueva reforma que «llega a destiempo, porque el profesorado ya hizo la programación». Con todo, insisten en que la vuelta a la situación anterior «es razonable» porque apuesta por la evaluación continua.
Así a todo, el representante de CCOO-Ensino insiste en reclamar «un debate serio» sobre cómo distribuir los tiempos dentro del curso, con aportaciones de otro órgano como el Consello Escolar de Galicia, porque «no es una cuestión exclusivamente de carácter laboral y didáctico».