La Autoridad Portuaria de A Coruña ha decidido reforzar los servicios de amarre, remolque y practicaje ante la «consolidación» e incremento «notable en los últimos meses» de la actividad de carga y descarga de mercancías en el puerto exterior de Punta Langosteira, ubicado en el municipio de Arteixo.
Así lo ha manifestado la entidad tras la aprobación este martes, en el consejo de administración, de los nuevos pliegos de prescripciones particulares de los servicios de remolque y amarre, que, además de adaptarse a las nuevas directrices de la Unión Europea, recogen la necesidad de aumentar los medios materiales.
En el caso del amarre se indica que debe contar como mínimo con dos embarcaciones en el puerto exterior –uno con el pliego actual–, mientras que el servicio de remolque debe tener al menos seis buques –cuatro en la actualidad–, tres de ellos para el puerto interior y otros tres para el exterior, y además «de mayor potencia que los actuales».
Las nuevas condiciones para el servicio de practicaje ya habían sido aprobadas en el anterior consejo de administración, celebrado el pasado 25 de octubre. Establecen un mínimo de tres embarcaciones, por las dos del pliego anterior. Con todo este incremento de medios, explica, «se refuerzan las condiciones de seguridad y operatividad» en las dos dársenas que gestiona la Autoridad Portuaria.
ACTIVIDAD COMERCIAL
Según destaca la entidad, la actividad comercial del puerto exterior alcanza «cerca de 16 millones de toneladas» de mercancía desde septiembre de 2012, cuando se realizó la primera operación en la dársena.
«Su mayor registro anual hasta el momento se alcanzó en 2017, con 2,3 millones de toneladas, una cifra que se pulverizará en las estadísticas de 2022, ya que, a falta del mes de diciembre, ya se han superado los 3,6 millones de toneladas», subraya.