El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha advertido este miércoles de los «efectos colaterales» que el cierre de la planta de Ence en la ría de Pontevedra tendría para otras empresas y ha puesto el ejemplo de la Papelera de Brandia, en Santiago de Compostela.
«Se vería muy afectada si se consiguiera el objetivo en el que muchos se empeñan. Aquí hay un buen ejemplo de que todo está interconectado, de cómo las decisiones que se toman tienen consecuencias», ha advertido el presidente gallego, durante su visita a esta factoría.
A la Papelera de Brandia, considerada como la más antigua de Galicia, con 212 años, Rueda le ha deseado «muchos años de vida», que «pueda seguir día a día superando dificultades» y «manteniéndose en un sector tan difícil».
Previamente, había intervenido el director gerente de Papelera de Brandia, Gaspar Barreras, ha enfatizado el papel de una compañía que llega a los cinco continentes, a más de 50 países.
Rueda ha personalizado en la familia de trabajadores de esta empresa de Vidán el apoyo con la supervivencia de su tejido empresarial, y ha recordado que, por ejemplo, el ejecutivo autonómico logró que el central incluyese en los planes de contingencia ayudas a la cogeneración, «como es el caso de muchas papeleras».
AYUDAS
Pero como el impacto de la subida de precios de la energía no deja de influir, ha destacado que los Orzamentos de 2023 duplicarán las ayudas para ahorro y eficiencia energética destinadas las pymes y hogares hasta alcanzar casi los 80 millones de euros.
Asimismo, ha remarcado que las cuentas autonómicas reforzarán también la transformación empresarial con más fondos y medidas como la Axenda Financeira, dotada de 140 millones para apoyar la solvencia y liquidez del tejido empresarial.