La Xunta ha dado por extinguido el incendio forestal que desde hace dos semanas afectaba a la Serra do Courel (Lugo), con un balance de 11.100 hectáreas arrasadas que lo convirtieron en el más grande de la historia de Galicia.
La última actualización ofrecida por la Consellería do Medio Rural en el mediodía, con datos hasta las 13,30 horas de este jueves, este gran fuego ha quedado apagado sobre las 11,53 horas de la mañana.
Este incendio afectaba a los ayuntamientos de Folgoso do Courel y de A Pobra do Brollón. Con 11.100 hectáreas quemadas, según las estimaciones de la Xunta, se convirtió en el mayor envergadura registrado nunca en la Comunidad debido a que se juntaron cinco focos: tres en Folgoso –dos de la parroquia de Vilamor y uno de la de Seceda– y dos en A Pobra –dos en Saa–.
En el operativo para dar por extinguidas las llamas, que llegó a provocar desalojos de viviendas, trabajaron durante dos semanas 314 agentes, 509 brigadas, 259 motobombas, 13 palas, 20 aviones, 27 helicópteros de extinción, 22 técnicos y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME), entre otros.
RESTO DE INCENDIOS
En cuanto al resto de incendios registrados en Galicia, el parte de Medio Rural no incluye novedades. Por tanto, el otro gran incendio forestal de esta ola, el de la comarca de Valdeorras, todavía no está extinguido, sino que sigue controlado. Nació en la parroquia de Riodolas, en Carballeda, y afecta a 10.500 hectáreas del Parque Natural da Serra da Enciña da Lastra.
En el caso del de Vilariño de Conso (Ourense), registrado en el Parque Natural do Invernadeiro, que ha calcinado 6.500 hectáreas, continúa estabilizado.
Además, sigue activo el que desde este miércoles afecta a Castrelo de Miño (Ourense), parroquia de Barral, y que se ha extendido hasta el municipio vecino de Cartelle. Las autoridades decretaron la situación 2 de alerta por proximidad a viviendas, pero quedó desactivada sobre las 4,00 de la mañana.
A estos hay que sumar un fuego en O Saviñao (Lugo), concretamente en la parroquia de Rebordaos, con alrededor de 20 hectáreas arrasadas tras haberse iniciado en, por lo menos, tres focos diferentes.
La ola de incendios registrada en Galicia desde hace dos semanas deja un balance histórico de más de 33.000 hectáreas quemadas, contando los que en los últimos días se fueron apagando.
En concreto, los incendios extinguidos quemaron unas 4.600 hectáreas en: Cualedro –31 hectáreas–; Baiona –46 hectáreas–; Melón –dos fuegos que suman 98 hectáreas–; Quiroga –345 hectáreas–; Ribadavia –67 hectáreas–; Covelo –37 hectáreas–; Cervantes, parroquias de Donís –75 hectáreas–, Noceda –182 hectáreas–, Cereixedo –65 hectáreas– y O Castro –0,5 hectáreas–; así como Rodeiro –110 hectáreas–; Palas de Rei –375 hectáreas–; Antas de Ulla –54,1 hectáreas–. Esta lista se completa con los tres en el municipio de Oímbra, parroquias de Rabal –2.100 hectáreas–, San Cibrao –370 hectáreas– y Videferre –919 hectáreas–.