El femónemo meteorológico registrado en Galicia, llamado sistema convectivo de mesoescala, «una gran tormenta que afecta a una gran área geográfica», dejó un total de 52 incendios provocados por rayos entre las 20,00 horas del jueves y las 8,00 horas del viernes.
En ese marco temporal, hubo cuatro horas en la que se produjeron la mayoría de los incendios, 41 fuegos, entre las 20,00 horas del jueves y la medianoche.
De ello ha informado el conselleiro de Medio Rural, José González, durante una visita al municipio lucense de A Pobra do Brollón, en donde el fuego en la parroquia de Saa ha obligado a activar una Situación 2 por proximidad a núcleos habitados, incluida la evacuación de 40 jóvenes de un campamento en O Busto.
En Galicia, han sido hasta el momento tres las Situaciones 2 activadas en las últimas horas, dos en el municipio de Folgoso do Courel y la otra la de A Pobra. Precisamente, en estos dos municipios y en el de Quiroga la situación se complicó al producirse «tormentas secas», es decir, hubo rayos pero no cayó agua que ayudase a extinguir esos fuegos.
A esto se une la problemática de los conocidos como «rayos latentes», aquellos que han provocado un incendio «por debajo de la tierra y después aparecen», ya que pueden tardar en manifestarse en el exterior, por lo que es posible que aparezcan más fuegos «a lo largo de hoy o mañana».
La ola de calor, con temperaturas extremas, y las tormentas registradas en la pasada noche, han recrudecido los incendios forestales registrados en la comunidad gallega, donde los más grandes, en alrededor de una decena de municipios, dejan ya más de 1.500 hectáreas arrasadas.
MEDIOS DE LA UME
En declaraciones a los medios en A Pobra, el conselleiro ha explicado que se dirige a Galicia un pelotón de unos 30 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y tres motobombas.
Mientras, están desplegados por la comunidad la treintena de medios aéreos operativos. Asimismo, ha explicado que se ha demandado un nuevo hidroavión FOCA al Gobierno central, el cual ha sido concedido.
González destaca que «todas las administraciones están trabajando a destajo para proteger a la gente de las aldeas». Apela a la prudencia y colaboración ciudadana «en estos días tan complicados».
Cuestionado sobre si el bajo nivel de los embalses provoca dificultades en las tareas de extinción, José González ha admitido que esa problemática «puede ser siempre una complicación para el trabajo de medios de extinción», si bien asegura que están «cargando rápido dentro de la dificultad».
Además, las «altas temperaturas no están ayudando nada en la extinción», por lo que queda mucho trabajo para perimetrar los incendios.
A preguntas acerca de las quejas sobre retraso en la llegada de medios aéreos a Folgoso do Courel, el conselleiro de Medio Rural ha indicado que había orden de «no entrar antes de las 10,30 por reglas de seguridad» aérea, dado que las aeronaves tienen «necesidad de claridad del día para empezar a actuar». Afirma que «se trabajó con diligencia» y no hubo «ningún problema técnico».