Los trabajadores de la refinería de Repsol de A Coruña han iniciado este viernes la primera de las tres jornadas consecutivas de huelga convocadas a nivel nacional por los sindicatos para exigir una revalorización salarial en el proceso de negociación de un nuevo acuerdo marco para el grupo.
«Pedimos simplemente que se nos garantice el poder adquisitivo y la estabilidad en el empleo», ha destacado el delegado sindical de CCOO y miembro del comité de empresa de la refinería de Repsol en A Coruña, Tino Túñez, en declaraciones a Europa Press.
La huelga ha sido convocada por CCOO, UGT, USO y el Sindicato de Trabajadores (STR) con el objetivo de visibilizar la precariedad laboral de 16.000 empleados de Repsol en toda España, más de 1.800 en Galicia.
SEGUIMIENTO
Túñez ha denunciado unos servicios mínimos «abusivos del 100%» que hacen que sea «muy complicado» tener un seguimiento «amplísimo» de la huelga, aunque ha asegurado que este viernes la implicación por parte de los trabajadores ha sido «relevante».
Los empleados han realizado una concentración y una marcha «parando el tráfico» en los alrededores de la refinería, en la que ha participado «alrededor de 70 personas», según ha explicado el delegado sindical.
Ha destacado también la presencia de piquetes «en la entrada y salida del turno», que se mantendrán a lo largo de todo el fin de semana.
NEGOCIACIONES
Respecto a las negociaciones del nuevo acuerdo marco, Túñez ha señalado que la empresa «no está negociando» y «está coaccionando» a los trabajadores «de una forma o de otra» para que no secunden la huelga.
Fuentes de Repsol han indicado a Europa Press que la compañía «en todo momento» ha mantenido abiertos los canales de diálogo con la parte social «tratando de acercar posturas y flexibilizando sus posiciones».
En este sentido, ha confirmado que hará «todo lo posible» para alcanzar un acuerdo de incremento salarial que tenga en cuenta «el poder adquisitivo de los empleados» y que «garantice la competitividad retributiva de la empresa».
En relación al seguimiento de la huelga, Repsol ha afirmado que la refinería de A Coruña está operando «con normalidad» y a nivel nacional el seguimiento está siendo «escasísimo».
Está prevista una segunda fase de protestas los días 13, 14 y 15 de agosto que afectará de nuevo a los 1.000 centros de trabajo que la multinacional tiene repartidos por toda España.