Facultativos especialistas en Medicina Interna con vinculación laboral en el Sergas distribuidos en las siete áreas sanitarias han elaborado una carta dirigida a la Consellería de Sanidade y otros cinco organismos en la que alertan de una «situación caótica» que «puede comprometer la calidad asistencial», por lo que urgen una reunión con la Administración sanitaria autonómica y avisan de posibles movilizaciones en hospitales «que podrían culminar en una huelga en todo el colectivo de Medicina Interna de Galicia».
Alertan de que de forma generalizada los servicios de Medicina Interna dependientes del Sergas «soportan, de forma continuada, una actividad asistencial inasumible, cercana en muchas ocasiones al 170% del planificado para la plantilla actual, generando una situación caótica que preocupa enormemente por el riesgo de comprometer la calidad asistencial o incluso de la seguridad de los pacientes».
Asimismo, afirman que la reunión de directivos de Sanidade de este pasado jueves con los jefes de servicio y gerentes de las áreas, «calificada por la Consellería como exitosa, no refleja el sentir de una gran mayoría del colectivo de internistas gallegos».
«Ha sido un intento de acallar voces a través de las jefaturas de servicio, que son los encargados de organizar y distribuir la carga asistencial diaria, pero no los portavoces de esta demanda colectiva de consideración respeto y seguridad para pacientes y médicos», expone este colectivo de internistas.
Así, subrayan que «todo lo contrario; abre la brecha de entendimiento más si cabe entre los médicos y los que organizan el trabajo, queriendo vender que el ratio de internistas en Galicia es más que bueno cuando en vez de atender ocho pacientes diarios, como nuestra Sociedad recomienda vemos ¡18!».
Asimismo, han indicado que, teniendo en cuenta las ratios que la Consellería aportó en su nota de prensa tras la reunión con los jefes de servicio relativa a cifras del Ministerio de Sanidad, «si debiera haber 14,5 internistas por cada 100.000 habitantes, entonces en Galicia debería haber 392 internistas». «Y, sin embargo, ellos mismos han dicho que somos 253… faltarían 150 internistas», han subrayado.
Las causas de esta situación analizadas en la reunión, exponen, «fueron la progresiva falta de respeto y de conocimiento de la especialidad de Medicina Interna; el aumento exponencial de la demanda a la especialidad de Medicina Interna, sin el consiguiente aumento de efectivos de personal médico; la falta de sustitución en vacaciones o bajas, incluso prolongadas y la precarización de los contratos, génesis de la fuga de internistas jóvenes buscando mejores condiciones de trabajo tanto hacia la sanidad privada, la pública de otras comunidades, becas de investigación u otros países de la UE».
PROPUESTAS
Las propuestas ofertadas por el colectivo pasan desde la cobertura del 100% de las plazas vacantes en todos los servicios de Medicina Interna que existen a día de hoy; «de forma inmediata realizar los planes funcionales de los distintos servicios de Medicina Interna de Galicia, donde se determine de forma detallada y realista el número de facultativos necesarios según las recomendaciones de tiempo de la Sociedad Española de Medicina Interna, plazas que deben de ser convocadas y cubiertas a la mayor brevedad posible e incentivar la ocupación de las plazas de difícil cobertura con fórmulas que no castiguen, sino que premien (sin excluir a los hospitales de Barbanza y Salnés entre aquellos de difícil cobertura)».
A ello suman «comprometerse a la realización de OPE de forma anual/bianual ligada al Concurso de Traslados Abierto y Permanente ofreciendo en ambos procesos la totalidad de las plazas que existen e incrementar el número de plazas MIR de forma inmediata».
Finalmente, solicitan una «reunión urgente» con responsables sanitarios de la Administración autonómica y una representación de los trabajadores implicados, que, avisan, «de no concretarse podría poner en marcha todas las medidas de protesta que dentro de las leyes se le otorgan a las organizaciones sindicales y a los trabajadores, sin descartar ninguna, incluyendo la realización de movilizaciones en los centros hospitalarios, que podrían culminar en una convocatoria de huelga en todo el colectivo de Medicina Interna de Galicia».
APOYO DE SINDICATOS
Por su parte, la Confederación de Sindicatos Médicos en Galicia (CESM) ha expresado, a través de un comunicado, «su rotundo apoyo a los facultativos de Medicina Interna del Sergas por la lamentable situación que están atravesando, por la sobrecarga de trabajo que soportan por falta de recursos humanos» y anuncia que «respaldará incondicionalmente» las iniciativas que emprendan para defender sus reivindicaciones.
Este sindicato médico expone que los Servicios de Medicina Interna junto, con las Unidades de Críticos y el apoyo de los Servicios de soporte «han llevado en estos dos años el peso de la respuesta a la pandemia, encargándose de los pacientes más complejos, vulnerables y con estancias más prolongadas en la hospitalización, y en el primer nivel asistencial la ‘lucha la libraban’ los servicios de Urgencias, la Atención Primaria y los PACs».
CESM reivindica la labor desarrollada por todos los facultativos de estos servicios, que «han trabajado muy por encima de sus obligaciones», por «su compromiso ético con la sociedad, con los pacientes e incluso con la Administración, que ahora adopta una actitud totalmente desleal, sin valorar ni reconocer su trabajo y esfuerzo, más allá de las palmadas de los balcones al comienzo del confinamiento».
Agrega este sindicato que las plantillas de Medicina Interna «cuentan con bastantes de sus miembros cerca de la jubilación, y a raíz de los acontecimiento de los últimos tiempos y del desprecio de la Administración, desmotivadas y desanimadas; sin recambio generacional, en fin, un Servicio que, junto a Pediatría y Radiodiagnósticos, se encuentra prácticamente abocado al desmantelamiento en algunos hospitales de Primer Nivel, como otros que irán surgiendo en un futuro cercano».
Por ello, considera «que no se puede seguir con esa política de gestión basada en medidas coercitivas y en el chantaje laboral, y guiada por el malo será», y, añade, «cuando la situación bordea el colapso en el que venga detrás que arree, mostrando una total y absoluta falta de gestión y planificación de la Consellería de Sanidade y del Sergas».
«Los profesionales de Medicina Interna no se lo merecen, ni están dispuestos a soportarlo, ya que la solución pasa por medidas positivas que incentiven a los profesionales, porque sólo así podremos mantener un Sistema de Salud de calidad y eficiente, como se merecen nuestra sociedad y nuestros pacientes», esgrime.
CESM «teme» que la reunión mantenida por el conselleiro de Sanidade y los jefes de servicio de Medicina Interna «no va a aportar solución alguna al problema, al menos soluciones que satisfagan las expectativas y las necesidades de los profesionales implicados, unos facultativos que se han hecho acreedores de un reconocimiento laboral y profesional que ahora se les está negando».
Este sindicato médico reitera su apoyo a los profesionales de Medicina Interna porque no se puede «admitir apaños y parches sin el consenso con todos los afectados y verdaderos perjudicados en este momento», y, sentencia, «menos buscar soluciones laborales fuera de los cauces de representación legal establecidos».
En esta línea, CIG-Saúde atribuye esta situación en Medicina Interna a la «falta de planificación y la eventualidad», por lo que solicita una reunión extraordinaria de la Mesa Sectorial para «negociar una salida urgente a esta situación».
