El consejero delegado de Altri, José Soares de Pina, garantiza que el impacto ambiental de la fábrica de fibras textiles que prevé implantar en el municipio de Palas de Rei (Lugo) «va a ser muy reducido».
Así lo ha expresado en un encuentro informativo en Lugo este martes, en el que también han participado los conselleiros de Economía y Medio Rural, Francisco Conde y José González, así como la directora xeral de la Sociedade Impulsa Galicia, Enyd López.
Sobre esta planta, que será la primera en España de fibras textiles –la segunda en Europa–, José Soares ha señalado que la captación se va a construir «aguas abajo» de la factoría, con lo cual «se está utilizando agua que resulta también de lo que es la recirculación».
Precisamente, entre las 46 ubicaciones que se barajaron para el proyecto estaba As Pontes (A Coruña), que se descartó por ser una zona «sensible» desde un punto de vista ambiental, mientras que tampoco se optó por A Mariña debido a que no se cubrían los requisitos mínimos de caudal de agua. Los criterios de cercanía a plantaciones de eucalipto también influyeron para elegir a Palas, en donde se construirá sobre 150 hectáreas de terreno.
Esta fábrica, que se prevé poner en marcha entre finales de 2024 y comienzos de 2025, supondrá unos 2.500 puestos de trabajo entre empleos directos e indirectos, así como una inversión de unos 800 millones de euros.
FONDOS NEXT GENERATION
Asimismo, el consejero delegado de Altri confía en que el proyecto cuente con fondos europeos Next Generation. «Nos sorprendería mucho no tener acceso», sostiene.
En esta línea, el conselleiro de Medio Rural, José González, asegura que el proyecto es «financiable» con fondos Next Generation por «sostenibilidad y economía circular», dado que se va a realizar partir de madera de bosques gallegos. Subraya que esta iniciativa «no tiene parangón en ningún otro lugar del mundo».
Con ello coincide el vicepresidente económico de la Xunta, Francisco Conde, quien explica que este es «un proyecto que conoce el Gobierno de España» y aguarda que esos fondos europeos puedan «acompañar» a la fábrica de Altri.