Agentes de la Policía Nacional de Santiago de Compostela han detenido a cuatro personas en relación a los daños producidos en un piso turístico alquilado supuestamente por una pareja para la realización de una fiesta ilegal en abril de 2021, en plena pandemia por la Covid-19.
Según ha informado la Policía Nacional, los hechos sucedieron en la madrugada del 23 al 24 de abril de 2021, fecha en la que la propietaria de un apartamento ubicado en la zona vieja de la ciudad compostelana lo alquiló a través de una plataforma de Internet, supuestamente a una pareja que solo estaría una noche.
«En aquel entonces estábamos en plena pandemia por el Covid, lo que suponía que se encontraban en vigor múltiples limitaciones, entre ellas la que prohibía la reunión de más de cuatro personas en domicilios», destaca la Policía.
Así, «lo que parecía un alquiler rutinario, se transformó en una fiesta ilegal por todo lo alto donde acudieron entre 15 y 20 jóvenes, la mayoría universitarios y residentes por aquel entonces en la capital gallega», detallan las mismas fuentes policiales.
Cinco varones a través de diferentes chats de mensajería organizaron la fiesta «invitando a numerosas personas, a pesar de las limitaciones vigentes por aquel entonces», incide la Policía. «Lo que para la propietaria del piso parecía recuperar su actividad de alquiler de inmuebles después de muchos meses sin tener ingresos, finalmente se convirtió en una pesadilla», añade.
Cuando se personó en su vivienda para ver cómo había quedado tras alquilar la misma supuestamente a una pareja, se encontró el piso «destrozado» con «botellines y colillas por todas partes, cristales y lámparas rotas, un sofá destrozado, colchones desgarrados e incluso un reguero de sangre por el suelo».
Aparte de estos destrozos de la casa también se llevaron un televisor, un router y una vajilla, perdidas que la propietaria ha cuantificado en más de 5.000 euros.
Fruto de la investigación realizada, la Policía pudo averiguar que en la fiesta habían participado un hombre y una mujer, que tras varias declaraciones finalmente aportaron los datos suficientes «para encauzar la investigación», indican las mismas fuentes.
DELITOS
Por ello, se produjeron cuatro detenciones en Santiago por todos estos hechos. Se les imputa la presunta comisión de varios delitos de apropiación indebida, daños y simulación de delito.
La investigación continúa abierta para la localización del último de los organizadores que actualmente no reside en Santiago, señala la Policía, que concreta que las pesquisas han sido realizadas por funcionarios del Grupo de Robos, adscritos a la Brigada Local de Policía Judicial de la Comisaría compostelana.