El líder de los socialistas gallegos Valentín González Formoso (As Pontes, 1971) deja claro que quiere ser el candidato del PSdeG a la Presidencia de la Xunta pero se muestra dispuesto a apartarse si hay otro compañero con «más opciones» de lograr que «la bandera socialista impere en San Caetano».
«Quiero ser el candidato a la Xunta y lo seré si soy el mejor para ello, si compañeros lo quieren y, sobre todo, si Galicia así lo quiere», señala en una entrevista concedida a Europa Press en la que también apela a la «generosidad» y reconoce que el objetivo de que el PSdeG llegue a gobernar Galicia «no se puede poner en peligro por una aspiración personal».
Formoso sostiene que, en lo que de él dependa «será candidato» y, aunque asegura que en el PSdeG hay «un elenco de compañeros y compañeras enormemente capaces», rechaza señalar otras opciones. «No me puedo permitir el lujo de buscar quién puede ser el candidato o candidata cuando yo estoy convencido de que voy a ser yo pero, en cualquier caso, con respeto absoluto a la militancia y la ciudadanía gallega», expresa.
Después de algo más de tres meses desde que cogió las riendas del PSdeG, el también alcalde de As Pontes y presidente de la Diputación de A Coruña defiende el modelo de partido en el que trabaja, basado en la «cercanía con la gente» y que «mira frente a frente a la problemática que están sufriendo muchos colectivos». Además, subraya que la formación «estará con Galicia siempre» y será «leal con los compañeros y compañeras del PSOE».
Precisamente, reforzar la defensa de los intereses de Galicia fue uno de los puntos que incluidos en la ponencia que los socialistas gallegos aprobaron en su XIV Congreso, un documento que marcará la actuación del partido los próximos cuatro años. Así, preguntado sobre sí el PSdeG debe marcar distancias con Ferraz para reivindicar los asuntos de Galicia, considera que «no hay que promover» una línea de independencia de las directrices nacionales sino «estar a la altura de las circunstancias cuando las circunstancias y Galicia así lo ordenen».
«No hay que forzar el cambio de criterio, simplemente hay que creer en ese criterio, creer en Galicia y a nadie le puede parecer mal», remarca en una entrevista en la que, precisamente, apunta que «la falta de respaldo social» del PSdeG en las pasadas autonómicas estuvo relacionada como «la pérdida de identidad» del partido «en la defensa de los intereses de los gallegos y las gallegas».
«NOSOTROS NO SOMOS INDEPENDENTISTAS»
En esos comicios autonómicos los socialistas se situaron como tercera fuerza por detrás del BNG. Preguntado sobre cómo será la relación con los nacionalistas en lo que resta de legislatura y en un contexto en el que próximamente habrá elecciones municipales, Formoso remarca que «cada uno tiene su proyecto». «Totalmente distinto, es muy distinto el proyecto del PSdeG al del PP, pero también al del BNG», subraya.
Aunque reconoce que PSdeG e BNG comparten «un proyecto progresista común» que dio «grandes momentos» a Galicia y que «está dando grandes momentos en otras instituciones», subraya que cada una tiene su «ideario». «Nosotros no somos independentistas, el BNG es un partido independentista, un partido nacionalista», subraya.
A poco más de un año para que el PSdeG afronte su primer examen electoral con él como líder, las elecciones locales, Formoso aboga por diferenciar los procesos». «La ciudadanía sabe distinguir cuando está escogiendo a un alcalde o alcaldesa, al presidente de la una diputación o al presidente de la Xunta. Son procesos absolutamente distintos y lo acabamos de ver en el proceso anterior», destaca.
FUTURO COMO ALCALDE
Precisamente, sobre si volverá a optar a la Alcaldía de As Pontes (A Coruña), un cargo que ostenta desde hace 14 años, afirma que es una «decisión muy personal» que se debe tomar teniendo en cuenta «lo que necesita la sociedad a la que vas a representar». «Si esa compatibilidad existe, si es necesario pues se verá en el momento adecuado y lo compartiré con mis compañeros y compañeras y, sobre todo, con la sociedad de mi pueblo y con la sociedad gallega también», explica.
El dirigente socialista sostiene que su experiencia como regidor, presidente de la Diputación de A Coruña y secretario xeral del PSdeG supone una «simbiosis muy productiva». «Si eres capaz de compatibilizarlo en base al principio de delegación, de generación de equipos, creo que es francamente productivo», incide para asegurar que se irá «viendo» si «el procedimiento es perfectamente compatible».
Además, avanza que tendrá una mayor presencia en el Parlamento de Galicia como «sede de la soberanía popular» en la que el PSdeG hará propuestas de forma «habitual» y aprovecha para poner en valor la labor que desempeña Luis Álvarez como nuevo portavoz parlamentario.
CONGRESOS PROVINCIALES DEL PSDEG
En el fin de semana que los socialistas gallegos han arrancado sus congresos provinciales con la celebración del de Pontevedra, Formoso celebra que las primarias fuesen «procesos limpios, ordenados, intensos y tensos, pero con el objetivo claro de respetar la voluntad de la militancia».
Tras las citas provinciales, los socialistas deberán afrontar la renovación de sus asambleas locales. Preguntado sobre si estos procesos podrán avivar tensiones entre la militancia a pocos meses de las municipales, Formoso se muestra convencido de que «los conflictos serán los mínimos».
«Pretendemos que se fomente la participación, pero tenemos claro que no podemos perder la perspectiva», señala el jefe de filas del PSdeG, que recuerda que el «fin último es servicio a la sociedad». «Somos un instrumento de la sociedad, no un fin en nosotros mismos», subraya.
En este punto y cuestionado sobre si durante los procesos de renovación interna la sociedad percibe a un PSdeG centrado en las cuestiones internas, considera que los gallegos van a observar un «estilo distinto» durante su etapa al frente del partido.
«La ciudadanía está percibiendo que no hay peleas internas ni yo participo en ningún tipo de pelea interna. Estoy concentrado al 99% de mi tiempo en conectar con la sociedad gallega y serle útil, que es la mejor manera de que seamos merecedores de su confianza», subraya en una entrevista en la que también asegura que «solo puede hablar cosas buenas» del que fuera su rival en las primarias, Gonzalo Caballero. «Es un militante al que yo aprecio. Sus opiniones son tenidas en cuenta con total normalidad», indica.
FINANCIACIÓN AUTONÓMICA
El líder de los socialistas gallegos también reflexiona sobre los compromisos que el Gobierno debe cumplir con Galicia e incide en la necesidad de que, «en un escenario de negociación de lo que es la batalla de las batallas, la financiación autonómica», se haga primar «la igualdad de oportunidades y la solidaridad», principios en los que, según apunta, está asentado el Partido Socialista.
«El principio de solidaridad funcionó en este país durante décadas y debe prevalecer en el reparto final», incide Formoso, que defiende que haya «negociaciones bilaterales» entre el Estado y las comunidades pero con «resultados multilaterales». «Entiendo que Cataluña, que supone el 30% del PIB, tenga que tener una conversación bilateral con el Gobierno del Estado. ¿Dónde está el problema? Al igual que la tiene que tener el País Vasco, la Rioja, Extremadura… y que la tiene que tener Galicia», apunta.