Los fondos Next Generation han sido el objeto del debate en la Cámara protagonizado por el portavoz socialista, Gonzalo Caballero, y el titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, quien ha vuelto a quejarse de que Galicia no conoce «las condiciones concretas» que acompañarán el acceso a estos recursos y ha advertido que el Ejecutivo que dirige Pedro Sánchez podría usarlos para beneficiar «a sus socios» a fin de «paliar la inestabilidad parlamentaria» que le sustenta.
Así se ha pronunciado después de que Caballero le instase a actuar con «valentía para orientar el futuro» en vez de «apatía para gestionar el presente».
El socialista instó al presidente gallego a «aprovechar el doble incremento del 30%» de los fondos que llegan a Galicia «como principal motor de construcción de una nueva etapa post covid».
En concreto, ha aludido «al 29% más» que Galicia recibirá en la inversión territorializada de los presupuestos del Estado y «al 31% adicional» de fondos europeos que se destinarán a los presupuestos de la Xunta.
«Comprométase con la modernización, con la cohesión, con la equidad, y póngase a gobernar en vez de decir ‘pasapalabra’ ante cada uno de los retos fundamentales del país», ha aseverado, mientras que Feijóo ha replicado que, por el momento, Galicia de los fondos Next Generation ha recibido «cero» y, en su conjunto, menos recursos europeos de los que le corresponderían según el sistema de financiación.
PEAJES EN LAS AUTOVÍAS
Además, Feijóo ha vuelto a pedir conocer el detalle del acuerdo con la Unión Europea para la concesión de los Next Generation y se ha mostrado especialmente preocupado en relación a la posibilidad de que se implanten peajes en las autovías.
También ha insistido en que teme que el Ejecutivo central use los recursos para «paliar la inestabilidad parlamentaria» que le sustenta. Y para Feijóo, que esto ocurrirá está «comprobado» con el sector del automóvil y la fábrica catalana de baterías.
Así las cosas, el dirigente popular ha pedido a Caballero –quien posteriormente, tras un alegato en el que reivindicó su «inquebrantable» compromiso con Galicia y con el Parlamento, dijo que «su prioridad» no era que se fijasen peajes en las autovías gallegas– que «no se calle» y defienda los intereses de Galicia.