La Policía Local de Ourense ha detenido a tres personas de nacionalidad rumana y vecinos de la capital ourensana por amenazas y agresión a agentes después de una reyerta provocada por un estacionamiento indebido del vehículo de una de ellas durante una mudanza.
Según ha informado la Policía Local, los hechos sucedieron sobre las 17,30 horas de este pasado martes en la confluencia de la Avenida de Portugal con la calle Irmáns Xesta en Ourense.
Las mismas fuentes policiales han relatado que la Policía Local recibió en la tarde de este pasado martes una comunicación telefónica que alertó de una furgoneta que estaba estacionada sobre la acera interrumpiendo el paso de los peatones, por lo que al lugar se trasladó una patrulla municipal.
Al llegar y comprobar lo denunciado, los agentes procedieron a solicitar a las personas que allí realizaban una mudanza el permiso para esa tarea, sobre todo por «el estacionamiento indebido y la ocupación de la acera», indica la Policía Local. Al ser la respuesta negativa y ser advertidos de que tenían que retirar el vehículo del lugar, las tres personas allí presentes se negaron a ello, «de forma alterada y agresiva, increpando y amenazando» a la patrulla.
Por ello, tuvieron que acudir al lugar dos patrullas más, subrayan las mismas fuentes, momento en el que uno de los individuos después detenidos, un varón de 23 años, agredió a varios agentes, mientras que las otras dos personas, un chico de 21 años y una mujer de 30, intentaron en distintos momentos agredir a los agentes.
De este modo, tuvo que mediar una cuarta persona, familiar de estas personas de nacionalidad rumana vecinas de Ourense, que logró retener a dos –el varón de 21 años y la mujer de 30– en un portal, para evitar más agresiones, al tiempo que era detenido el primero de ellos, el joven de 23 años. Posteriormente fueron arrestados los otros dos.
OTRO FAMILIAR, EN BÚSQUEDA
En la reyerta otra persona, familiar de los detenidos, huyó del lugar tras esgrimir un mástil de madera de unos dos metros, que le fue interceptado, «evitando así otra agresión», destaca la Policía Local, que indica que tiene «información suficiente para poder ser identificado plenamente en las próximas horas».
A raíz de estos hechos un policía local tuvo que ser asistido en un centro sanitario y se han instruidos diligencias judiciales.