El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha lamentado el «uso político» que, a su juicio, se ha dado ante el caso del joven madrileño que denunció una agresión homófoba que días más tarde él mismo desmintió. Para el mandatario gallego, los delitos de odio «existen» y «no pueden taparse» por una «denuncia falsa», al tiempo que ha censurado que hechos de este tipo se empleen «para sacar rédito político».
En la reuda de prensa posterior al Consello de la Xunta celebrado este jueves, el presidente gallego ha manifestado que lo acontecido en torno a la falsa agresión homófoba deja «dos evidencias».
Por un lado, considera que la existencia de delitos de odio, «algunos con motivación homófoba», es «un hecho objetivo» que no queda desmentido por que se dé una denuncia falsa. Por otra parte, cree que evidencia que los políticos emplean estos casos «en beneficio de su partido y en contra de otros».
«Hay que ser respetuoso y no usar los hechos delictivos en beneficio propio y en perjuicio político ajeno», ha expresado Núñez Feijóo, que ha tildado de «lamentable» que un político «haga demagogia» con estas cuestiones, algo, a su juicio, es más grave si se produce «desde un ministerio».
Por tanto, considera necesario que se ofrezcan «explicaciones» por parte del Gobierno y, en concreto, que lo haga el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, cuya dimisión ha sido pedida por el líder del Partido Popular, Pablo Casado.