El dibujante Jaime Martín ha destacado este miércoles en A Coruña «su visión de niño y adulto» a la hora de retratar la vida de su padre y de sus abuelos en sus obras, ‘La guerra silenciosa’ y ‘Jamás tendremos 20 años’, que forman parte de una trilogía que cerró con ‘Siempre tendremos 20 años’, en la que cuenta su propia historia de juventud.
El artista catalán ha comparecido en el Kiosko Alfonso, donde esta tarde ofrecerá una charla a las 19,30 horas en el marco del Salón del Cómic de A Coruña.
Martín ha señalado que tenía una «visión infantil» de la historia de su padre, en la que lo consideraba «un héroe» al escucharla desde niño. Al escribirla ahora tiene «una visión adulta», en la que ya no solo es «heroico», sino que «hay otros matices». Lo mismo ocurre con su abuelo, cuya figura dijo que «cobra una dimensión mayor» en su adolescencia.
Su obra tiene muchos elementos de metaficción, Martín cuenta que «dibujaba a sus amigos, con sus caras y sus nombres» en ‘Siempre tendremos 20 años’. En su obra no salen todos sus amigos, ya que para tener «una mayor facilidad», el dibujante afirma que le era «más sencillo» unir a dos amigos en un personaje, que añadir un quinto.
La reacción de su familia a su obra fue muy buena y quedó «muy contenta». Entre risas recordaba que su padre dejó de «contar batallitas» en casa, y empezó a «dar la lata a los vecinos» con el cómic. El único roce que tuvo fue con un familiar por sacar a sus padres sin consultarle, por ello, para el cierre de la trilogía llamó a todos sus amigos para pedirles permiso.
Los cómics han tenido mucho éxito en Francia, algo que «sorprendió» al dibujante. Cree que en su primero, en el que cuenta la historia de su padre haciendo la mili en África, ‘el nexo colonial fue un punto de encuentro’. En el segundo, achaca su éxito a que la Guerra Civil es «un tema internacional».
El autor ha impadtido charlas en universidades, algo que no se esperaba al no ser historiador, pero ha destacado que aprovechó para contar «la visión de mis padres» y también «anécdotas» que aportaban otro punto de vista.