La Policía Local de Ferrol intervino el pasado fin de semana en un piso de la Rúa da Terra para disolver una fiesta en la que participaban «numerosas personas» y en la que realizó 24 denuncias contra 16 de ellas por incumplir la normativa sanitaria por la Covid-19, entre otros aspectos.

Según ha informado la Policía Local, fueron llamadas de vecinos, incluso de otros edificios, las que alertaron de que el ruido y la música que se escuchaban «impedían el descanso».

Al llegar, los agentes enviados comprobaron que el sonido procedente de un primer piso «se escuchaba perfectamente en la calle». Tras varias llamadas al portero electrónico, alguna de las cuales fue respondida con la frase «aquí no pedimos nada», asegura la Policía Local, consiguieron que los ocupantes de la vivienda abrieran.

En la puerta del piso fueron recibidos por un hombre que manifestó ser uno de los inquilinos y organizador de la fiesta. Los agentes le indicaron que todas las personas del interior tenían que ser identificadas y que la celebración debía terminar.

El hombre fue a una estancia y acudió acompañado de otros seis, todos ellos «desprovistos de mascarilla de protección», han resaltado las mismas fuentes. Estos insistieron que eran los únicos ocupantes del piso, pero los agentes les explicaron que eran conscientes de la presencia de más personas, que había podido «ver a un grupo mayor a través de las ventanas».

Tras negarse el inquilino «en repetidas ocasiones» a que los policías pudieran acceder al interior del inmueble a comprobar lo que manifestaba, decidieron esperar en la calle a que los ocupantes abandonasen la vivienda.

A las 4,00 horas salieron del portal dos mujeres y otro hombre, quien mostró «actitud irrespetuosa y de desprecio a los agentes al tiempo que trataba de marcharse del lugar», indican las mismas fuentes.

Uno de los identificados anteriormente bajó a continuación y, «en similar actitud, menospreció a los funcionarios policiales, indicando que él y sus acompañantes eran gente muy estudiada, muy preparada y con mucho mundo» y que no sabían qué «tipo de estudios tenían los agentes», relatan las mismas fuentes.

A las 4,50 horas bajaron dos hombres más y a las 5,00 horas, dos mujeres y otros dos varones. Todos ellos fueron identificados. En total, contra esas 16 personas, con edades comprendidas entre los 22 y 29 años, se tramitaron 24 denuncias, 20 de ellas por infracciones leves a la Ley de Salud de Galicia por incumplir la prohibición de reunirse con no convivientes en un domicilio particular. En este caso las sanciones tienen un importe de hasta 601 euros.

Otras dos denuncias, por infringir la misma ley, sed debieron a infracciones de carácter grave, sancionadas con importes de 3.005 a 6.010 euros, «siempre y cuando no surja ningún brote o contagio por Covid relacionado con la celebración de la fiesta», aclara la Policía Local.

Finalmente, en dos casos, mayores de las denuncias por cuestiones sanitaria, se unieron propuestas de sanción por sendas infracciones graves de la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, multadas con importes de 601 a 30.000 euros.

DISPOSITIVO PROVINCIA DE LUGO

Por otra parte, en la provincia de Lugo la Policía Nacional y la Guardia Civil realizaron 133 propuestas de sanción en controles entre el 29 de julio y el 5 de agosto.

La subdelegada del Gobierno en Lugo, Isabel Rodríguez, ha detallado en una reunión con fuerzas de seguridad de la provincia que se llevaron a cabo en ese periodo 644 controles, con la participación de 1.322 agentes.

Además, se realizaron inspecciones en establecimientos de hostelería. En total, ha señalado, fueron identificadas 9.021 personas y se controlaron 7.709 vehículos. Fruto de estos controles, se realizaron 133 propuestas de sanción.