Uno de los menores detenidos este viernes por la Policía Nacional por su vinculación con el crimen de Samuel tiene antecedentes penales. Así lo ha confirmado el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, en declaraciones a los medios en un acto en Santiago de Compostela.
Por su edad, los dos últimos detenidos, coruñeses y del grupo de amigos del resto de detenidos, pasarán a disposición de la Fiscalía de Menores, y no del Juzgado de Instrucción nº8 de A Coruña, encargado del caso.
Los nuevos detenidos, sin relación previa con la víctima, se suman a los otros cuatro arrestados –tres hombres y una mujer de entre 20 y 25 años–, que en la mañana de este viernes han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción nº1 de A Coruña, de guardia este viernes.
El delegado del Gobierno ha confirmado que los dos menores están en dependencias policiales y, tal y como ha asegurado, «uno de ellos sí que tiene antecedentes penales». Además, indicó que, al igual que los cuatro anteriores, prestarán declaración en el marco de las 72 horas estipuladas.
A la pregunta de si participaron activamente en la paliza, Miñones ha contestado que «si están detenidos, es porque se prevé que también que sean participantes de los actos», aunque ha matizado que «en la toma de declaración y en los interrogatorios se verá el grado de implicación».
José Miñones ha señalado que estas nuevas detenciones son fruto de «toda la investigación», es decir, de las pruebas testificales a las 15 personas que a comienzos de semana acudieron a declarar a la comisaría de Lonzas, de los interrogatorios a los cuatro detenidos que este viernes han sido puestos a disposición judicial y del visionado de imágenes.
Las imágenes, publicadas por eldiario.es constatan que Samuel fue agredido en dos ocasiones y que fue perseguido por sus agresores hasta la entrada de la Avenida de Buenos Aires, donde recibió los golpes mortales que acabaron con su vida.
Por su parte, Carla Sánchez, que dijo ser amiga de los detenidos, ha declarado ante los medios en las inmediaciones del juzgado que rechaza que se trate de un crimen «homófobo», aunque dice estar de acuerdo en que «paguen por lo que han hecho».
