Alcoa afirma que «compete» ahora a la sociedad estatal de participaciones industriales (SEPI) «seleccionar el o los candidatos con los que iniciar negociaciones» para la compraventa de la planta de aluminio de Cervo (Lugo).
El Ministerio de Industria y la SEPI, según apunta la multinacional en un comunicado, han recibido el informe de los avances del proceso de venta de la planta de aluminio de San Cibrao, «incluidas propuestas de los candidatos a adquirir la planta».
La multinacional del aluminio señala que ha informado también a los participantes de la mesa multilateral (Gobierno central y Xunta, sindicatos y representantes de los trabajadores).
Respecto a las propuestas, destaca que «varias aceptan el acuerdo de intenciones tal y como Alcoa ha propuesto o con mínimos cambios», que dicho acuerdo es «muy similar» al ofrecido por Alcoa ya en septiembre de 2020 y que «todas las propuestas indican que el apoyo de las administraciones es imprescindible», en la forma de «un marco competitivo de precios de energía garantizado, financiación y/o garantías».
De este modo, la empresa se manifiesta «en disposición de firmar el acuerdo de intenciones propuesto con SEPI», una vez que esta entidad «cuenta ya con ofertas que puede analizar y negociar directamente con los candidatos».
Para continuar el proceso, asegura, «compete a SEPI seleccionar el o los candidatos con los que iniciar negociaciones y evaluar si acepta o propone cambios en los términos del acuerdo de intenciones con el que SEPI compraría la planta a Alcoa».
Así las cosas, Alcoa considera que el Gobierno de España, a través de la SEPI, «debe asumir una participación directa en dicha venta y en el futuro de la misma, puesto que en la situación que atraviesa la planta hay un vínculo directo que relaciona competitividad del marco energético con la viabilidad de la fábrica».
«La venta a SEPI proporcionará además a los trabajadores una mayor seguridad de que la venta cuenta con el respaldo del Gobierno de España», incide.