Los tres chicos –de 18, 19 y 24 años– fallecidos la noche de este miércoles en un accidente ocurrido en la carretera que une las localidades pontevedresas de Caldas de Reis y Moraña, circulaban por una zona frecuentada habitualmente por jóvenes de las localidades cercanas.
En relación a la ubicación del vehículo, el regidor de Moraña, José Cela, ha comentado que el siniestro sucedió en «el entorno del embalse» del municipio, una zona que, como ha indicado a Europa Press el alcalde de Caldas de Reis, Juan Manuel Rey, frecuentan habitualmente jóvenes de las localidades vecinas.
El coche siniestrado, un Citroen Xsara, impactó frontolateralmente con un camión tras saltarse, supuestamente, un stop en el kilómetro 222 de la carretera N-640 a su paso por Caldas de Reis, un lugar en el que, tal y como ha señalado el responsable del municipio caldense, «nunca se había producido ningún accidente». Los tres ocupantes fallecieron en el acto.
El conductor, de 19 años de edad y originario de Moraña, no tenía permiso de conducir. Lo acompañaban una joven de 18 años en el asiento del copiloto, vecina de Vilagarcía de Arousa, y otro varón de 24 años de Caldas de Reis en el asiento de atrás, que era además el propietario del vehículo.
Fuentes consultadas por Europa Press han indicado que «no se explica que el joven de 24 años tuviese un coche a su nombre», dado que «presentaba dificultades intelectuales graves».
Respecto a las víctimas del camión, el conductor, que fue sometido además a controles de alcoholemia y drogas con resultado negativo, salió herido leve, mientras que su acompañante, una mujer que salió despedida del vehículo, resultó herida grave.