Los dirigentes políticos de al menos unos 26.000 gallegos de cinco ayuntamientos ubicados en las provincias de A Coruña, Pontevedra y Ourense tuvieron sobre la mesa de forma pública acuerdos encaminados a cambiar el color político del gobierno local a cambio de rotar en la Alcaldía en el ecuador del mandato, lo que sucederá a mediados de junio.

Y es que el 15 de junio se cumplirán dos años desde la fecha de la constitución de los gobiernos municipales tras los últimos comicios locales celebrados el 26 de mayo de 2019, con lo que los pactos o negociaciones que hubo en su día vuelven a estar en el foco y evidencian, como verbaliza en una conversación con Europa Press el teniente de alcalde de Vila de Cruces (Pontevedra), Julio López, que cada caso es «único» y tiene «su propia historia».

A diferencia de lo que sucede en el resto de municipios en cuestión (Salceda de Caselas –también en Pontevedra–, Toques y Santa Comba –A Coruña– y San Amaro –Ourense–) en los que no se pone en duda la existencia de este pacto para rotar en la alcaldía, los dirigentes políticos de Vila de Cruces discrepan incluso sobre si se llegó a cerrar o no un acuerdo para realizar este cambio dos años atrás.

También hay discrepancias en casos como el de Santa Comba (A Coruña), en el que el único edil de Compromiso, David Barbeira, se hizo con el bastón de mando municipal tras sellar un pacto de gobierno con el PSOE (con seis concejales) que incluía la rotación de la Alcaldía con el socialista José Antonio Ucha. Sin embargo, las tensiones no tardaron en empezar y no han hecho más que «empeorar», según confirman a Europa Press ambos dirigentes.

Pero también hay ejemplos exitosos y en los que, salvo sorpresa, no habrá problemas para la rotación. Es el caso de Salceda de Caselas o de la pequeña localidad coruñesa de Toques, en la que por segundo mandato consecutivo, PSOE y BNG gobiernan de la mano y con el compromiso de intercambiarse la Alcaldía cuando llegue el momento.

INTERPRETACIONES OPUESTAS EN VILA DE CRUCES

Entre tanto, la historia de Vila de Cruces saltó a los focos públicos esta semana a raíz de unas declaraciones radiofónicas realizadas por el teniente de alcalde, de la formación independiente Xuntos, en las que aseguraba que el regidor, Luis Taboada, de su misma formación y exmiembro del PP, no tenía previsto en ningún caso ceder el bastón de mando al BNG.

El argumento de Julio López, que ha reiterado en declaraciones a Europa Press, es que «no se puede romper lo que no existe». Así, ha recordado que, si bien en su día la concejala del PSOE en el Consistorio sí entró en su gobierno (lo abandonó en verano de 2020), el BNG apoyó a Taboada en la investidura para «evitar que siguiese el PP», pero eligió «quedarse en la oposición» y no entró en el gobierno.

«Es verdad que se habló de eso, como de otras muchas cosas, pero nunca se llegó a firmar nada. No se puede romper lo que no existe. Qué mayor prueba hay que el hecho de que nos hayan hecho oposición desde el primer día», ha trasladado el teniente de alcalde de Vila de Cruces.

Al «valor de la palabra» sin embargo, se aferra el BNG, para reivindicar estar al frente de la Alcaldía los dos años que restan de mandato. «Había un acuerdo claro y explícito, aunque fuese de forma verbal y no por escrito», remarca el portavoz local del Bloque de Vila de Cruces, Álex Fiuza, en una entrevista radiofónica local que difunde en el perfil de Facebook de la formación en el ayuntamiento.

Y en este sentido, afirma que el Bloque «cumplió su parte» y apoyó a Taboada en la investidura.

TENSIÓN EN SANTA COMBA

En el caso de Santa Comba, las tensiones entre los miembros del Gobierno –con especial intensidad entre el socialista José Antonio Ucha y el propio regidor– llegaron prácticamente al principio y solo han ido en aumento conforme avanza en el mandato. En esta coyuntura, aunque ni Ucha ni David Barbeira lo dan expresamente por roto, sus palabras sí hacen ver difícil que la Alcaldía pueda rotar el próximo verano con normalidad.

Así, si Ucha ha lamentado el «boicot» a las iniciativas socialistas por parte del alcalde, en declaraciones a Europa Press, el regidor responde con acusaciones similares. Barbeira se queja de que «no» se ha cumplido el compromiso de apoyo adquirido por parte del PSOE e incluso atribuye «dejación de funciones» al portavoz socialista, que es teniente de alcalde.

Ucha tiene la visión opuesta y, aunque rechaza hacer «futurología» sobre lo que sucederá en relación al pacto para rotar la Alcaldía, sí subraya que los socialistas han «cumplido» su parte, «por mucho» que el regidor tenga «un concepto mal entendido de la lealtad».

Tampoco el alcalde es claro acerca de si cederá el bastón de mando, pero recalca que, si el PSOE considera que «todo se hace tan mal» como afirma «en todos los plenos y en todos los foros», debería «impulsar ya» una moción de censura. «¿Qué sentido tiene esperar a junio o a julio si hay un alcalde tan malo?», se pregunta.

EL EJEMPLO DE TOQUES

Ejemplo de acuerdo que funciona es el pacto de gobierno alcanzado entre socialistas y nacionalistas en el municipio coruñés de Toques. Así, se prevé que una vez llegue al ecuador del mandato, el actual alcalde, el socialista Miguel Buján, ceda el bastón de mando a José Ángel Penas (BNG).

Tal y como ha recordado el regidor en declaraciones a Europa Press, se trata del segundo mandato en el que ambas fuerzas llegan a un acuerdo para rotarse en la Alcaldía. Un pacto que va «según lo previsto» por lo que, conforme ha señalado también el Bloque, no se considera que pueda haber ningún tipo de problema de cara al relevo.

Otro municipio en el que se prevé que haya un cambio en la Alcaldía a partir del próximo 15 de junio es Salceda de Caselas (Pontevedra). En esta localidad, un pacto entre Movemento Salceda (MS) –formación que obtuvo cuatro ediles en las pasadas municipales– y el PSdeG –se hizo con tres concejales– elevó a la alcaldía a la actual regidora Dolores Castiñeira (MS), que cederá a mitad de mandato el cargo a favor de la socialista Verónica Buján.

Precisamente, fuentes municipales consultadas por Europa Press, han destacado que en esta localidad «no existe ningún tipo de conflicto» entre las fuerzas que integran el gobierno municipal. Además, han señalado que ambas prevén comparecer públicamente de forma conjunta ante los medios para dar cuenta del cambio.

«CONVERSACIONES PENDIENTES»

Por su parte, también se prevé que cambien de alcalde si todo transcurre según lo previsto los poco más de 1.000 vecinos de la localidad ourensana de San Amaro.

En este ayuntamiento, un acuerdo de gobierno que incluía la rotación en la Alcaldía entre el PSOE –dos concejales– y Xuntos por San Amaro –tres ediles– dio el bastón de mando a la socialista María del Carmen Corral en la investidura de junio de 2019.

Con todo, tras la dimisión de la alcaldesa por motivos personales, fue investido alcalde su compañero de filas Rubén Pérez, quien ha explicado a Europa Press que prevé convocar para mediados de junio el pleno en el que se produciría el relevo en favor del portavoz de Xuntos por San Amaro, Carlos Paz.

Aunque Rubén Pérez ha explicado que tienen «pendientes» las conversaciones previas a este cambio en la alcaldía, Carlos Paz ha considerado que no debería de haber ningún problema de cara a este cambio en un municipio en el ambas formaciones gobiernan en coalición.