La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, ha reclamado que las Comunidades Autónomas puedan tener la «potestad» para ordenar el toque de queda una vez finalice el estado de alarma, previsiblemente, el próximo 9 de mayo.
En declaraciones a los medios durante el inicio de la construcción de una promoción de VPO en Palma, Armengol ha recordado que todavía queda tiempo para que finalice el estado de alarma –momento en el que dejaría de aplicarse esta medida– y que el Govern sigue estudiando qué medidas podrá decretar pasada esa fecha y qué margen dejará el Estado a las CCAA.
En este sentido, la presidenta del Govern ha resaltado que el toque de queda se ha demostrado como una de las medidas más efectivas por lo que ha reclamado que las autonomías puedan ordenarlo.
En relación a las medidas que puedan aplicar las CCAA, Armengol ha recordado que en Baleares los tribunales siempre han ratificado las medidas que se han dido decretando.
Sobre el efecto de las vacaciones de Semana Santa y Pascua en las cifras de incidencia, la presidenta ha insistido en que aún quedan algunos días para ver el impacto de esos días en los datos de contagio y ha señalado que los próximos días serán decisivos para ver si hay incrementos importantes o rebrotes.
Así, ha añadido, sería la próxima semana –las actuales medidas estarán vigentes 15 días– cuando se valorarán los posibles cambios, siempre en la Mesa de Diálogo Social, incluida la apertura de los interiores de la restauración.
Sin embargo, ha insistido en la necesidad de que los objetivos –evitar contagios y salvar vidas– no se distorsionen.