El presidente de AstraZeneca España, Rick Suarez, ha expresado el «respeto de la compañía» hacia la decisión del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas de este miércoles en el pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), de suspender la administración de la vacuna contra el coronavirus desarrollada por AstraZeneca en los menores de 60 años.
«Seguimos en contacto directo y continuado con las autoridades sanitarias españolas y respetamos todas sus decisiones, con el firme compromiso de seguir contribuyendo a poner fin a la pandemia –ha asegurado–. Nuestra compañía sigue y seguirá trabajando con todos nuestros recursos disponibles y poniendo todo nuestro esfuerzo y dedicación para alcanzar los objetivos de vacunación en nuestro país y así salvar millones de vidas. Estamos seguros de que la ciencia sigue siendo la única vía con la que, entre todos, conseguiremos volver a la normalidad cuanto antes», concluye.
Esta decisión se ha producido después de un encuentro previo entre los ministros de Sanidad de la Unión Europea que ha sido convocado con carácter de urgencia por la ministra de Sanidad de Portugal, Marta Temido, país que ostenta actualmente la presidencia rotatoria semestral del Consejo de la Unión Europea, tras el dictamen de la EMA.
La Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios del Reino Unido (MHRA) y la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) han completado este miércoles su evaluación de los eventos de coagulación sanguínea extremadamente raros con plaquetas bajas de más de 34 millones de personas vacunadas con la vacuna COVID-19 de AstraZeneca en el Reino Unido y la UE.
AstraZeneca recuerda que los organismos reguladores han solicitado que se actualicen las etiquetas de la vacuna en el Reino Unido y la UE. «Ninguna de las dos agencias identificó ningún factor de riesgo, como la edad o el sexo, ni una causa definida para estos sucesos extremadamente raros –señala en un comunicado–. Sin embargo, llegaron a la conclusión de que estos acontecimientos tienen una posible relación con la vacuna y solicitaron que se incluyeran como un posible efecto secundario extremadamente raro».
La compañía señala que «estas dos revisiones reafirmaron que la vacuna ofrece un alto nivel de protección contra todas las severidades de COVID-19 y que estos beneficios siguen siendo muy superiores a los riesgos.