La nueva vicepresidenta tercera del Gobierno, Yolanda Díaz, y la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, han asumido este miércoles sus nuevas responsabilidades con multitud de elogios a la trayectoria política del líder de Podemos, Pablo Iglesias. En su discurso, la política ferrolana recordó a la poetisa gallega Rosalía de Castro y en la que reprochó los intentos de «boicotear» al Gobierno de coalición.
Concretamente, ambas han loado el papel de su predecesor para impulsar el ‘escudo social’ ante la crisis del covid-19, los Presupuestos Generales del Estado o la puesta en marcha del Ingreso Mínimo Vital, pese a toparse con el «ruido y la furia» de los que están «anclados» en el «inmovilismo» y la «parálisis».
Así lo han indicado ambas durante el acto protocolario de traspaso de las carteras, que asumen las competencias de Iglesias tras su renuncia a sus cargos para ser candidato de Unidas Podemos a las elecciones madrileñas del 4 de mayo.
Junto a Iglesias también han participado el ministro de Consumo, Alberto Garzón, la titular de la cartera de Igualdad, Irene Montero, su homóloga en Educación, Isabel Celaá, y el ministro de Universidades, Manuel Castells.
Díaz ha querido dar las gracias al vicepresidente saliente por su trabajo «contra viento y marea» para desplegar el ‘escudo social’ o el Ingreso Mínimo Vital, y ha asegurado que le tendrán «siempre presente».
Mientras, Belarra ha subrayado que si a alguien «se lo han puesto difícil» para ser vicepresidente es precisamente a Iglesias, quien es una persona «intelectualmente extraordinaria», con principios éticos «muy arraigados» y que deja el Gobierno para «dar la batalla clave» en Madrid a los «enemigos de la democracia».
Previamente, Iglesias también ha ensalzado a Díaz, a quien ha descrito como la «mejor ministra de Trabajo de la historia» y ha pronosticado que será una «magnífica» vicepresidenta que jugará un papel «fundamental» en el futuro de la democracia española.
De la nueva ministra de Derechos Sociales ha destacado que, en su etapa de secretaria de Estado, ha demostrado sobradamente su «inteligencia política, capacidad de trabajo y empatía hacia los colectivos más vulnerables», así como su labor «imprescindible» para que se cumpla el acuerdo de Gobierno. «Este Ministerio queda en las mejores manos, estoy seguro de que lo vas a hacer mejor que yo», ha remachado.
RECUERDO DE LAS HORAS MÁS DURAS DE LA PANDEMIA
Estas palabras cálidas han tenido su correlato por parte de Díaz, que tras abrazarse a Iglesias, ha parafraseado al escritor José Saramago al aludir a dos elementos centrales para el desempeño del cargo público: «memoria» y «responsabilidad».
Tras destacar su «orgullo» por ostentar el cargo de vicepresidenta, Díaz se ha retrotraído al 31 de marzo del año pasado, cuando en plena primera ola de la pandemia, España registró más de 800 fallecidos por Covid-19 ese día y las actividades no esenciales estaban invernadas.
Entonces, el Ejecutivo tuvo que aplicar «medidas de emergencia» con una batería de iniciativas cuya finalidad era «salvar vidas» y «puestos de trabajo» en «medio del más dramático episodio» de la historia reciente. «Ninguno olvidaremos la crudeza de esas horas ni la determinación que nos motivaba», ha confesado.
DÍAZ CENSURA A LOS QUE HACEN «APOLOGÍA DE TIEMPOS PEORES»
Por tanto, Díaz, que citó a Rosalía de Castro y se dirigió a su hija Carmela, ha reprochado los intentos de «boicotear» la acción de Gobierno con «retórica reaccionaria» y «apología de tiempos peores», en contraposición a la «unidad» y «responsabilidad» que demostraron hace un año en el Ejecutivo para proteger la salud y el empleo.
Y en este contexto ha hecho mención destacada a la actitud de Iglesias, que frente a la «labor destructiva de quienes reclamaban la futilidad de su esfuerzo», impulsó «frente a viento y marea» un «escudo social que es ejemplo para las democracias europeas», extendiendo también ese reconocimiento al presidente Pedro Sánchez y al resto de miembros del Consejo de Ministros.
La ministra de Trabajo también ha subrayado siempre les va a acompañar el «diálogo», la «justicia social», el «feminismo» y la «política de generosidad» con la guía permanente de la preocupación por «los demás».
Ahora toca «reparar el daño» causado por la pandemia y «alumbrar el camino de la reconstrucción» en contraposición a quienes siempre «están en el lado contrario, no ayudan y nunca se comprometen».
Desde su vicepresidencia y su Ministerio va a combatir la «tierra baldía» de los trabajos precarios para ayudar a modernizar la economía, haciendo una mención aparte a la «generosidad» de los agentes sociales para buscar «soluciones y acuerdos».
BELARRA SE COMPROMETE A PINCHAR LA BURBUJA DEL ALQUILER
Por su parte, la ministra de Derechos Sociales ha manifestado que ha sido una «suerte» acompañar a Iglesias en el Ministerio y ha reivindicado su papel «absolutamente imprescindible» para construir el ‘escudo social’, el despliegue de 7.000 millones en ayudas directas a las pymes afectadas por la crisis del Covid-19 y unos Presupuestos Generales «expansivos» y «sociales».
A partir de ahora, se va a «esforzar al máximo» para seguir la línea marcada por el exvicepresidente y buscará sellar los objetivos por los que «luchó sin descanso», como la aprobación de la Ley de Vivienda, la futura Ley de Infancia, los Objetivos de Desarrollo Sostenible o las mejoras para el Ingreso Mínimo Vital.
Belarra también ha fijado como prioridad poner los derechos sociales en el «centro de la reconstrucción» para ayudar a las personas que afrontan el futuro «sin esperanza e ilusión». En esta línea, ha indicado que las políticas sociales son esenciales para lograr la igualdad y la redistribución de la riqueza».
De esta forma, se ha comprometido a «pinchar la burbuja del alquiler» defendiendo el derecho de acceso a la vivienda, aseí ocmo los servicios públicos de cara a garantizar que todas las personas tendrán una «vida digna».
Por último, ha asegurado que Díaz ha sido una magnífica ministra pero va a ser «aún mejor líder», en alusión a su nueva faceta al frente de Unidas Podemos.