La Xunta avanza en las obras de continuación de la Vía Ártabra en Oleiros (A Coruña) para su conexión con la AP-9 lo que permitirá, ha afirmado la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, «recortar» un tercio la conexión de la comarca con la ciudad en 2022.
«Mejorará la competitividad de los polígonos industriales, pero también la calidad vida de los ciudadanos, que pasarán menos tiempo en la carretera», ha apuntado.
Según ha explicado la responsable autonómica en una visita a los trabajos, estas obras de ampliación le «darán sentido» a los diez kilómetros ya en uso, por los que transitan, ha señalado, 5.000 vehículos al día. Se impulsará, ha abundado, «la conectividad» de Oleiros, Sada y Cambre con la ciudad y el acceso a la autopista con los cuatro nuevos kilómetros.
Vázquez ha añadido que su consellería espera la «autorización» del Ministerio de Transporte para la conexión con la AP-9 y ha recordado que el Gobierno central es el «único responsable» de marcar los peajes en esta carretera. «La Vía Ártabra es libre de peajes», se enorgulleció.
Asimismo, ha destacado que se modificó el trazado del vial en esta parte para dar «aún más protección» tanto a población como a territorio» y censuró las críticas del Ayuntamiento de Cambre, sin nombrarlo, porque, ha comentado, «se enrocan en posiciones estériles». Aún están en estudio, ha afirmado en relación a las alegaciones a este cambio.
CONEXIÓN
Infraestruturas, manifestó la conselleira, invierte 40 millones en las obras que ya están certificadas al 40%, afirmó, y, sin especificar, prometió que en 2022 entrará en uso. En el trazado se incluye el enlace para la futura conexión del vial con la autovía A-6. La ciudad será el destino del 90% de los movimientos, según uno de los técnicos de la empresa que ejecuta las obras.
Sobre otra infraestructura de la comarca, el tren al Puerto Exterior, la conselleira ha denunciado que no hay «compromiso ni implicación serios» en su licitación por parte del Gobierno central y aseguró que la Xunta «seguirá dando la batalla, aunque sea en solitario». «De esa licitación depende el futuro del tejido empresarial y de la ciudad», ha remarcado.