El comité clínico, en el que están integrados 35 expertos, y que asesora a la Xunta en la pandemia ha decidido cambiar los criterios que regirán la toma de decisiones debido a la pandemia. Uno de ellos ha sido consensuado en la reunión de este lunes, tras la cual el presidente autonómico, Alberto Núñez Feijóo, ha informado en rueda de prensa de la situación y de los detalles de la desescalada.
En concreto, las restricciones que adoptará el Gobierno gallego a partir de ahora tendrán en cuenta la incidencia a 7 días como dato con mayor peso frente a la cifra a 14 días. Este cambio está ligado, en parte, a la necesidad de dar respuesta «más ágil» a la situación epidemiológica, en buena parte, ante el avance de la cepa británica: «un 63 por ciento predominante».
Esto explicaría, tal y como ha desgranado Feijóo en la rueda de prensa, la situación del área sanitaria de A Coruña, con un 80 por ciento predominante de la cepa británica. De hecho, esta área sanitaria permanecerá con cierre perimetral, aunque con movilidad interna entre sus municipios, desde este viernes, ante la incidencia más elevada y la alta transmisibilidad que se está observando con esta variante.
Feijóo ha indicado que Galicia «sigue dando pasos adelante» en la desescalada, pero «no puede avanzar más rápido». Además, también ha reflexionado acerca de que los test de antígenos «no» detectan el virus en asintomáticos y personas con el virus no activo, por lo que ha indicado que se tratará de concentrar este tipo de pruebas en los ayuntamientos con una incidencia más alta y las PCR en los demás casos.
«Debemos actuar con agilidad cuando la situación empiece a empeorar», ha convenido Feijóo, quien ha indicado, asimismo, que «hay que avanzar firmes pero seguros».
Otro de los cambios que se empieza a aplicar es el concepto del área sanitaria, frente a las almendras que rigieron en la segunda ola como método para los cierres. Por ejemplo, a partir del viernes permanecerán perimetradas, aunque con movilidad interna las áreas sanitarias de Pontevedra-Salnés, A Coruña y Ferrol –esto rige para todos los casos salvo ayuntamientos con más de 500 casos por 100.000 habitantes, que estarán a su vez cerrados en sí mismos–.
En la segunda ola, en la que se habían establecido hasta cuatro niveles de restricciones, los cierres perimetrales se hicieron por municipios o conjuntos de municipios en torno a un núcleo común.
REPASO DE DATOS
En su repaso por los datos, Feijóo ha destacado que las medidas «han funcionado» y ha apuntado datos como el descenso de casos activos de un 64 por ciento (frente al pico de 22.600) o la bajada en pacientes UCI, de 254 (pico) a los 146.
También se ha referido a la caída en hospitalizados (un 52 por ciento menos) y a que Galicia «por fin» se sitúa por debajo del nivel máximo de riesgo, situado en 250 casos por 100.000 habitantes, con un descenso del 79,7 por ciento en los últimos siete días y del 69,7 a 14 días.
El presidente de la Xunta también ha indicado que la tasa de positividad está en pruebas diagnósticas está en el 4,8 por ciento, por debajo del 5 por ciento que recomienda la OMS. Así pues, Feijóo también ha llamado la atención sobre que Galicia tiene «mucha población sin inmunizar»: «Todos los datos positivos siempre tienen la cara negativa».
Con todo, ha subrayado que Galicia tenga una menor tasa de mortalidad como dato positivo y ha defendido que es «mejor no pasarla e intentar (llegar) a vacunarse», ya que padecer la enfermedad puede dejar efectos secundarios.
En su intervención, Feijóo ha insistido en que «todos los esfuerzos» están puestos en «salvar vidas». «Galicia sigue siendo un año después, en fechas parecidas, la comunidad con la tasa más baja de la península, solo superados por Canarias y Baleares, con un 78,95 de tasa de mortalidad».
Feijóo ha concluido que «la evolución está siendo muy buena, pero lejos de alcanzar los objetivos de a lo que se debe llegar». Así, ha puntualizado que «hay más hospitalizados de lo que gustaría y más UCIS ocupadas» en una intervención en la que ha insistido en la responsabilidad individual.
«Estamos avanzando en la desescalada con la intención de no volver a atrás, pero si tenemos que volver a atrás, volveremos», ha sentenciado Feijóo, quien ha destacado como «buena noticia» que se haya completado la vacunación en las residencias de mayores y discapacitados (en las que no había brotes).