La Consellería de Cultura, Educación e Universidade apercibió el pasado mes de enero a la directora del CEIP San Xoán de Becerreá tras confirmar que se repartieron mascarillas y elementos de higiene contra la COVID-19 con el logotipo del partido político ‘Galicia Sempre’, fundado por el exsocialista Manuel Martínez y alcalde de este municipio lucense.
Así lo ha explicado en comisión parlamentaria el secretario xeral técnico de la Consellería, Manuel Vila, en respuesta a una pregunta formulada por el diputado socialista Luís Álvarez.
El parlamentario reclamó explicaciones por esta situación «deplorable» y de auténtica «propaganda» en el propio centro, al que está vinculado el propio alcalde, además de por la actuación del Gobierno gallego para solucionar el problema.
El servicio de inspección tuvo conocimiento de los hechos el 11 de enero, tras la denuncia telefónica formulada por el portavoz socialista en el municipio.
El reparto entre el alumnado se realizó el viernes, a la vuelta de las vacaciones de Navidad, y consistió en un ‘kit’ compuesto por mascarilla, toallitas y gel hidroalcohólico, todos ellos con la simbología de la formación fundada por el regidor municipal.
Posteriormente y dado que no constaba ningún tipo de autorización para hacer efectivo ese reparto, tanto la jefatura como la inspección se pusieron en contacto con la directora del centro para abrir diligencias ante una «conducta improcedente y reprochable», que supone una fracción del principio de neutralidad que debe velar en el sistema educativo gallego.
PETICIÓN DEL AYUNTAMIENTO
Vila explico que la directora remitió un informe por correo electrónico en el que se hizo «plenamente responsable» de lo ocurrido y admitió que se trataba de una petición del propio Gobierno local, justificando que estos elementos se iban a repartir inicialmente en la cabalgata de Reyes que no se pudo celebrar por la COVID-19.
En todo caso, ha añadido, la responsable del centro pidió disculpas y aseguró que se trataba de un acto «de buena fe», para garantizar que velará para que no se vuelvan a repetir actos de este tipo.
Una vez valorada la situación y las circunstancias, los servicios de inspección decidieron remitir un apercibimiento a la directora para recordar que los hechos no se ajustaban al principio de neutralidad que debe velar en el sistema educativo y que recoge la legislación vigente y para advertir que de continuar con ese tipo de conductas podría incurrir en una «responsabilidad disciplinaria».
EXPLICACIÓN «POCO ACEPTABLE»
El responsable de la Consellería destacó, así, la «celeridad», la «proporcionalidad» y la eficacia de la actuación de la Xunta para «cortar cualquier tipo de acción» en este sentido.
No obstante, Álvarez consideró «poco aceptable» la justificación aportada por la directora del centro al tratarse de simbología de un partido político y no de «material institucional» o «de merchandising del Ayuntamiento de Becerreá».