El BNG de Vigo ha denunciado este martes la lentitud y la «violencia burocrática» que sufren los demandantes del Ingreso Mínimo Vital (IMV), y ha advertido de que las ayudas «no sirven» si no hay medios para agilizarlas y transparencia en la tramitación.
En una rueda de prensa, el concejal nacionalista Xabier Pérez Igrexas ha señalado que la crisis sanitaria del COVID ha agravado la situación de miles de familias en la ciudad y el Ingreso Mínimo Vital, que debería ser «una herramienta útil» para esas personas, «no se está desplegando con la suficiente eficacia».
Según ha recordado, además de que se trata de una «ayuda insuficiente para atender la actual emergencia social», «no sirve» si no se desplieguen las medidas necesarias, como recursos técnicos y humanos para agilizar las solicitudes. A ese respecto, ha apuntado que, según los datos recabados hasta octubre del año pasado, en la provincia de Pontevedra había caso 13.200 solicitudes, de las que aproximadamente la mitad corresponderían a la ciudad de Vigo, y solo se habían resuelto unas 2.300.
De hecho, ha enfatizado Xabier Pérez Igrexas, de los 2.500 perceptores de la Risga en Vigo, solo han dejado de cobrar esta ayuda (se supone que porque han pasado a percibir el IMV) unas 350 personas. «Es un verdadero desastre de gestión de una ayuda que es más esencial que nunca», ha lamentado.
Asimismo, ha denunciado la «violencia burocrática» que sufren los solicitantes de este ingreso, por las «demoras casi eternas» en la tramitación, por que se dan resoluciones «incorrectas» que reconocen la ayuda «en cuantía inferior» a la que corresponde, o porque «hay desestimaciones que carecen de motivación».
Por todo ello, el BNG de Vigo trasladará esta situación a su diputado en el Congreso, Néstor Rego, para que presente las iniciativas parlamentarias pertinentes y reclame en las Cortes «más transparencia» en la tramitación del IMV y medidas «organizativas y normativas» para agilizar las ayudas.