El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, ha acusado este jueves al presidente de la Xunta de plantear un «debate» sobre la obligatoriedad de usar mascarillas FFP2 en determinados ámbitos, con el fin de crear una «cortina de humo» para eludir su responsabilidad y tapar el «fracaso» de «su estrategia de salvar la Navidad».
Según ha señalado, en declaraciones a los medios tras mantener una reunión con la alcaldesa de Redondela, Digna Rivas, si la Xunta considera que las mascarillas FFP2 son «vitales» para proteger a la población del COVID, «debería explicar por qué en los últimos meses ha estado distribuyendo mascarillas de tela, con publicidad de la Xunta», entre diferentes colectivos, centros educativos y asociaciones.
Gonzalo Caballero ha reclamado a Núñez Feijóo que «resuelva los problemas» de los gallegos en lugar de buscar «cortinas de humo», aunque ha matizado que, si los expertos del comité clínico y las autoridades sanitarias avalan la obligación de ese tipo de mascarillas, el PSdeG lo respaldará. «Pero creemos que estamos en una campaña de despiste de Feijóo», ha añadido.
Al respecto, ha denunciado que el presidente gallego busca una «espiral de confusión y un debate baladí» en un momento de máximas restricciones y cierre de negocios por la mala evolución de la pandemia, lo que ha calificado como una «irresponsabilidad». «Vimos a Feijóo con mascarilla de tela, se repartieron por parte de la Xunta, y ahora cuando se ve que su estrategia de ‘salvar la Navidad’ no funcionó, prefiere huir hacia adelante para no rendir cuentas», ha criticado.
Caballero ha insistido en que si las autoridades determinan la obligación de usar FFP2, los socialistas lo «asumirán», pero ha recalcado que «ésa no es la cuestión fundamental en este momento».
Así, ha señalado que el pasado noviembre, cuando la segunda ola de la pandemia estaba «relativamente controlada», la Xunta planteó una estrategia para salvar la campaña navideña y «algo falló». Según el secretario xeral del PSdeG, las restricciones que se aplican desde esta semana, «se podían haber aplicado ya el 20 de diciembre».
