El portavoz del Grupo Popular, Pedro Puy, y el presidente de la Cámara, el también popular Miguel Santalices, mantuvieron un rifirrafe a costa de una camiseta que portó la portavoz del BNG en materia de energía, Noa Presas, en el pleno de la Cámara.
A raíz de diversas polémicas en la legislatura pasada, la Cámara impulsó unas normas de «decoro» para el Pazo do Hórreo que, entre otras cuestiones, trataban de impedir camisetas que pudiesen ser ofensivas para terceras personas.
Pero en este caso, el portavoz popular, según se pudo oír aunque no tenía el micrófono abierto (los periodistas ahora no pueden seguir las sesiones desde el hemiciclo por las medidas de seguridad de la covid-19), insistió en un acuerdo de la junta de portavoces que restringía también la colocación de carteles o cualquier otro símbolo en la tribuna de oradores.
La diputada Noa Presas llevó una camiseta en apoyo a los trabajadores de Siemens Gamesa (SGRE) que colocó en la tribuna. Santalices pidió verla y ella le dijo que «no era nada anticonstitucional».
Después de observar la camiseta, autorizó su colocación, ante las protestas del portavoz del grupo mayoritario, al que él mismo pertenece. Mientras hacía memoria de ese acuerdo, la parlamentaria se colocó la camiseta encima de la ropa.