El proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2021 llega este miércoles al Senado tras haber superado su primera votación del Congreso por amplia mayoría, por lo que acogerá 36 comparecencias esta semana y completará su tramitación con el objetivo del Gobierno de que no se introduzcan cambios, de forma que podrían quedar aprobados definitivamente el día 23 de diciembre para su entrada en vigor el 1 de enero.
Las nuevos Presupuestos llegan al Senado después de que el pasado jueves el Pleno del Congreso aprobase las primeras cuentas públicas desde que Pedro Sánchez fue investido presidente en 2018, tras una tramitación acelerada en la que se incorporaron al final más de 70 enmiendas y con el respaldo de 189 diputados de once formaciones (PSOE, Unidas Podemos, ERC, PNV, Bildu, PDeCAT, Más País, Nueva Canarias, Compromís, Teruel Existe y PRC), frente a los votos en contra de PP, Vox, Ciudadanos, Junts, UPN, Foro Asturias, Coalición Canaria y el BNG.
Previsiblemente estos posicionamientos se replicarán de nuevo en la Cámara Alta, donde los Presupuestos que pondrán fin a las cuentas del año 2018 del anterior Gobierno del PP podrían quedar aprobados el día 23 si no se introducen cambios, ya que en ese caso no tendrían que volver al Congreso.
No obstante, los grupos parlamentarios en el Senado son algo distintos, ya que si bien el grupo socialista cuenta con 113 senadores de 265, Unidas Podemos solo tiene una senadora de En Comú Podem integrada en el grupo parlamentario de Izquierda Confederal, y están representados otros grupos no presentes en el Congreso como Agrupación Socialista Gomera, Geroa Bai o Més per Mallorca.
Si algunas formaciones que han respaldado los PGE en el Congreso, como PNV (diez senadores) o ERC y EH Bildu (comparten grupo con 15 senadores), presentasen enmiendas precisarían del respaldo de los 97 senadores del PP (ya ha anunciado que volverá a presentar enmiendas), una situación que ya sucedió en el Congreso, donde PP o Cs lograron sacar adelante enmiendas firmadas por estas formaciones nacionalistas.
36 COMPARECENCIAS ESTA SEMANA Y DEBATE DE VETOS EL LUNES DÍA 14
La tramitación en el Senado arranca este miércoles con la publicación del proyecto presupuestario en el Boletín Oficial del Senado y la designación de la ponencia en la Comisión de Presupuestos, en donde se celebrarán 36 comparecencias de altos cargos desde este miércoles por la tarde para informar de nuevo de las distintas partidas.
El pistoletazo de salida de las comparecencias lo dará la presidenta de la AIReF, Cristina Herrero, a la que le sucederán durante estos días los secretarios de Estado de varios ministerios, el presidente del ICO o de empresas públicas como Aena, Adif o Puertos del Estado.
Así, los grupos tendrán de plazo para presentar propuestas de veto generales (análogas a las enmiendas a la totalidad en el Congreso) y a las secciones hasta las 12.00 horas del viernes 11 de diciembre, mientras que el plazo de presentación de enmiendas al articulado se ha fijado hasta las 18.00 horas del lunes 14 de diciembre.
Los vetos generales y a las secciones, que previsiblemente volverán a presentar desde la oposición partidos como PP o Vox aunque casi seguro no saldrán adelante, se debatirán en Pleno en la sesión que comenzará el lunes 14 de diciembre, previo al debate en Comisión de las enmiendas al articulado.
El miércoles día 16 por la mañana se producirá la reunión de la ponencia para dictaminar el jueves 17. De su lado, las enmiendas que no se acepten en Comisión podrían ser elevadas al Pleno en forma de votos particulares, cuyo plazo de presentación concluirá a las 12.00 horas del viernes 18 de diciembre.
PODRÍAN APROBARSE EL DÍA 23 Y ENTRAR EN VIGOR EN ENERO
Finalmente, la tramitación concluirá en la sesión plenaria que comenzará del martes 22 de diciembre y se prolongará hasta el día 23, pudiendo quedar aprobados de forma definitiva ese día o siendo devueltos al Congreso si se introducen cambios.
En caso de que se produjera cualquier modificación en el texto remitido por la Cámara Baja, o si se aprueba un veto a los Presupuestos, éstos tendrían que volver al Pleno del Congreso, para que decida si mantiene o revoca los cambios o, en su caso, levanta el veto.
Si la Cámara Alta no incluye modificaciones, como es la intención del Gobierno, los Presupuestos quedarían definitivamente aprobados el día 23 de diciembre, listos para ser publicados en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y entrar en vigor previsiblemente el 1 de enero.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, afirmó el jueves que el Gobierno no tiene previsto que se produzca «ningún tipo de modificación» por iniciativa de los grupos que promueven el proyecto (PSOE y Unidas Podemos) ni por las formaciones políticas que los han respaldado en el Congreso, lo que evitaría su vuelta a la Cámara Baja.
De cualquier forma, el calendario aprobado por el Senado para la tramitación de las cuentas permitiría una entrada en vigor de los Presupuestos el próximo 1 de enero, tal y como confía el Gobierno, ya que en caso de haber cambios, esas enmiendas se votarían en el Congreso el 29 de diciembre.
CAMBIOS: NO SUBE EL DIÉSEL NI SUELDO DEL GOBIERNO
En el Congreso quedaron vivas unas 3.000 enmiendas de las que finalmente se aprobaron más de 70, varias de ERC y Junts, respaldadas por PP y Vox en contra del criterio de las formaciones del Gobierno, que han movido en unos 3.000 millones las cuentas. Así, se ha limitado la subida del IVA a los productos azucarados para no aplicarla a lácteos edulcorados, y ha aumentado sustancialmente el gasto en partidas como la Dependencia, con 566 millones más.
De los 27.000 millones de fondos europeos adelantados en los PGE el Congreso ha dirigido 1.500 millones para un plan de recuperación de empleo industrial en zonas afectadas por los cierres, 370 millones para Educación Infantil, FP y el programa de refuerzo de Primaria y Secundaria. También se recogen en las cuentas un fondo de 275 millones para el transporte público municipal.
Entre las enmiendas más destacadas añadidas al proyecto de PGE se incluyen las de PSOE y Unidas Podemos con la ‘congelación’ de sueldos del Gobierno; o las pactadas con el PNV por las que se elimina la subida fiscal del diésel y se incluye la venta al ayuntamiento de San Sebastián de los cuarteles de Loyola.
Con ERC el acuerdo se ha plasmado en 100 millones de euros en inversiones ferroviarias en Barcelona –60 millones a AVE y 40 millones en ferrocarril y Rodalíes–, una nueva moratoria de cotizaciones para empresas y autónomos de tres meses, entre otros, entre otras tantas con EH-Bildu, PdeCAT, Más País, PRC, Teruel Existe o Compromís.
Los Presupuestos de 2021 incluyen el mayor gasto social de la historia con 239.000 millones de euros y la «mayor inversión pública de la historia», de 239.765 millones, un 10,3% más, incluyendo un adelanto de 27.000 millones de los fondos europeos, si bien los PGE se ejecutarán con independencia de cuando lleguen esos recursos.
En materia impositiva recogen un aumento del IRPF a rentas altas, un alza del 1% en el Impuesto de patrimonios de más de 10 millones de euros, se limitarán exenciones en Sociedades, se reducen desgravaciones e planes de pensiones privados y a ello se sumarán las tasas ‘Tobin’ y ‘Google’, un nuevo impuesto a envases de un solo uso y el IVA del 21% a refrescos.
Además, contempla una subida del sueldo de funcionarios y de pensiones públicas del 0,9%, mientras que las pensiones no contributivas subirán un 1,8%, el IPREM un 5%, y elevará notablemente las partidas de Educación (+70%), con récord en becas, Sanidad (+75,3%), dependencia (+34,4%), I+D+i (+80%) e infraestructuras (+114,8%), al tiempo que aumentan un 150% las ayudas al comercio, turismo y pymes.