La Diputación de A Coruña ha aprobado, en la sesión plenaria celebrada este viernes, un presupuesto de 184,5 millones, un 0,26% más que en el presente ejercicio, unas cuentas que salieron adelante con el voto a favor de todos los grupos menos el PP, que se abstuvo.
«Es el presupuesto más social de la historia de la Diputación», ha dicho diputado de Economía y Hacienda, Antonio Leira, en un pleno en el que no salió adelante una enmienda presentada por Marea Atlántica a las citadas cuentas.
No lo hizo, entre otras cuestiones, por el rechazo de los demás grupos a que una partida para redes provinciales se destinase a otro fin. Su edil, Alberto Lema, criticó que no hubiese «un trámite previo de diálogo» antes de llegar a pleno, algo que rechazaron desde las filas socialistas.
Las cuentas incluyen un incremento de partidas en el área social, que pasan de 11,8 a 27,4 millones, a lo que se suman otras medidas como la contratación de 300 profesionales en el área sanitaria o un aumento de 14 millones de euros para servicios de ayuda a dependientes y de emergencia social en ayuntamientos de la provincia, según se expuso en la presentación de las cuentas por parte del equipo de gobierno.
En la sesión plenaria, el diputado de Hacienda aludió también a la partida de casi nueve millones de euros para mantener centros educativos, una actuación que, ha incidido, es «competencia» de la Xunta.
Desde el PP, el diputado Evaristo Ben, ha expuesto que se abstienen para facilitar la aprobación, aunque reclamó la incorporación de algunas de sus demandas como aumentar las partidas para entidades sociales.
Por su parte, el presidente provincial, Valentín González Formoso, ha destacado la «altura de miras» de todos los grupos para sacar adelante estas cuentas. «Para que esto no sea una feria», ha añadido en relación a los debates en otras instituciones.