Decenas de trabajadores y dueños de agencias de viajes se han manifestado este miércoles ante el Parlamento gallego para lanzar un «SOS» y reclamar un plan de rescate específico. En declaraciones, la presidenta de la Plataforma en Defensa polas Axencias de Viaxes de Galicia, Mar Moreira, ha alertado de la situación «complicada» que viven sin ingresos durante este año, pero sin «ayudas directas» para hacer frente a gastos como alquileres y cotizaciones.
Así, durante la protesta se han realizado cánticos como ‘Queremos traballar e non emigrar’, al tiempo que han sonado pitos y bocinas. Además de maletas con mensajes en los que se podía leer ‘SOS agencias de viaje’, se han desplegado pancartas con lemas como ‘No se puede exigir impuestos si prohíbes tener ingresos’, ‘Sen ingresos desde 2019’ y ‘Plan de rescate xa!! Salvemos o noso emprego’.
En Galicia, hay más de 600 agencias de viajes que cuentan con dos o tres trabajadores cada una, lo que supone entre 1.200 y 1.500 empleos directos, además de subsectores que dependen de ellas como son los guías turísticos y las empresas de transporte, entre otros.
FALTA DE AYUDAS EN GALICIA
De este modo, Moreira lamenta que no pueden trabajar, mientras se acumulan las «deudas» y no pueden hacer frente a los gastos diarios. «Aquí en Galicia no hay ni un solo plan, sacaron bonos turísticos y a nosotros nos dejaron fuera», pone de ejemplo sobre un sector que considera olvidado por las administraciones.
En este sentido, el presidente en funciones a nivel estatal de la Plataforma Derechos Agencias de Viajes, Xabier Pombo, advierte de que «el futuro se presenta negro», pues «no hay expectativas». «Somos el gran desconocido y la gran piedra en el pie de las administraciones públicas porque no cuentan con nosotros para nada», se queja. Ahora, estas pequeñas empresas «tienen que renovar sus seguros de caución y de responsabilidad civil», con un gasto entre 2.000 y 3.000 euros.
Por ello, Pombo reclama al Gobierno gallego la exención del pago de estos seguros, así como «sacar unas ayudas dignas» dirigidas de forma expresa para las agencias de viajes. Relata que las cuentas de las agencias «están vacías», una situación «dantesca» en la que «hay compañeros que tuvieron que hipotecar sus casas para hacer frente». «Si nosotros fracasamos el turismo cae en picado», resalta.
«Nosotros no es que estemos trabajando gratis, es que estamos pagando por trabajar. Llevamos desde marzo cotizando, pagando salarios, alquileres, gastos de nuestras empresas, y lo peor de todo es que tuvimos que devolver todo lo que vendimos en 2019 que estaba para viajar en 2020», lamenta Pombo.
Censura que a las administraciones «no les importa» lo que suceda con las agencias, a pesar de tener 68.000 trabajadores en toda España y facturar una media de un millón de euros al año por cada empresa. «No contamos para nada», reprueba, a pesar de que «muchas familias» vivien de ellos. En contraposición a la falta de ayudas a estas pequeñas agencias, Xabier Pombo apunta a «los 700 millones» para el rescate del grupo Globalia, «una gran empresa que está en venta».
Durante la protesta se han acercado hasta los manifestantes representantes de los grupos como Ana Pontón (BNG) y Leticia Gallego (PSdeG) para trasladarles su apoyo.