El Parlamento de Galicia se prepara para restringir la presencia de diputados en el hemiciclo gallego y que la asistencia sea rotatoria durante las sesiones plenarias con el fin de minimizar los riesgos ante la expansión del virus.
Distintas fuentes consultadas por Europa Press han confirmado que hubo contactos entre los grupos parlamentarios –PPdeG, BNG y PSdeG– con la Presidencia, que dirige el popular Miguel Santalices, quien desde el inicio de la pandemia se ha mostrado favorable a adoptar medidas en el Pazo do Hórreo.
Así, en la institución se adoptaron medidas para el teletrabajo, junto con actuaciones como la instalación de controles términos y de puntos de hidrogel. También se reforzaron las medidas de limpieza y las labores de desinfección y, con las restricciones impuestas para la capital gallega por parte de la Xunta, también se limitó la afluencia en lugares comunes como la cafetería, además de cerrar las visitas en la tribuna de invitados de los plenos.
Otra de las actuaciones fue la colocación de pantallas de separación entre los 75 diputados de la cámara en el hemiciclo. Allí, se adoptaron medidas como la prohibición de quitarse la mascarilla en el escaño, de manera que solo se permite la intervención sin ella (hasta ahora ha sido así) desde la tribuna, que es desinfectada en todos los intervalos.
NUEVAS MEDIDAS
Pues bien, en un escenario en el que Galicia cerró el pasado viernes perimetralmente todas sus ciudades para evitar desplazamientos y contagios, el Parlamento estudia más medidas de restricción que tratarán de minimizar los contactos entre personas.
De hecho, durante el primer confinamiento y los sucesivos estados de alarma de la primavera, con el hemiciclo disuelto por la convocatoria de elecciones que luego se suspendió, las reuniones de la Diputación Permanente –con una veintena de parlamentarios– ya se celebraron en el espacio reservado para el pleno, con el fin de distanciar a los diputados entre ellos.
ROTATORIOS
En este escenario, distintas fuentes consultadas por Europa Press han confirmado que ha habido nuevos contactos con los representantes de los grupos y que la idea, a falta de concretar las medidas, es la posibilidad de limitar a alrededor de la mitad de los miembros de la cámara el número de asistentes en los escaños.
Mientras, el resto de los diputados de la Cámara podrán seguir la sesión desde sus despachos o en otras dependencias del Pazo do Hórreo, de manera que la presencia física sería rotatoria.
Con todo, se permitiría la coincidencia de la totalidad de los diputados en el momento de las votaciones. El voto delegado o telemático ya forma parte del reglamento del Parlamento y, en concreto, para situaciones derivadas de la pandemia, tras la reforma que vio luz verde el pasado mes de octubre y que ya fue usado por tres diputadas que tuvieron que guardar sendos confinamientos y cuarentenas.
Sin embargo, se trata de un derecho de los diputados que, como coinciden los grupos, debe estar limitado cuando se trate de delegar el voto. Esta posibilidad también existe para aquellas personas en situación de permiso de maternidad y paternidad y se reguló para este fin en 2012.
PENDIENTE DE CERRAR
Las mismas fuentes consultadas han indicado que todavía no está cerrada la medida y que está pendiente de nuevas conversaciones entre los grupos parlamentarios. En todo caso, también estará condicionada por las medidas que dicten las autoridades sanitarias.
La recomendación de limitar la presencia de diputados en las sesiones está vigente en el Congreso de los Diputados.