Investigadores del juicio que se celebra esta semana en la Audiencia Nacional contra una docena de independentistas gallegos por «ensalzar» y «justificar» el ideario de la organización terrorista Resistencia Galega han advertido de que las dos entidades a las que pertenecían –Causa Galiza y Ceivar– planeaban crear otra para captar militantes.
El juicio, que comenzó el lunes, se dirige contra Juan José Pérez Lorenzo, Salvador Gómez Crespo, José Antonio Fernández, Óscar Gómez, Borja Mejuto, Enrique Torres, José Antonio González Maceiras, Antón Arias e Isabel Iglesias, como miembros o simpatizantes de Causa Galiza; y contra Uxio Caamaño, Alfonso García e Iria Calvero, como integrantes de Ceivar.
Los hechos investigados giran en torno a los actos celebrados en 2014 y 2015 con motivo del 11 de octubre, Día da Galiza Combatente. La Fiscalía reclama para los doce acusados penas de entre cuatro y doce años de cárcel por delitos de integración en una organización criminal para la comisión de delitos de enaltecimiento de una organización terrorista y enaltecimiento del terrorismo, y pide también que la disolución de las dos entidades.
Uno de los investigadores ha contado durante la sesión de este miércoles que había un «reparto de roles» entre ambas organizaciones y un proyecto de futuro. Así, «Causa Galiza asume el enaltecimiento del terrorismo en los días de Galiza Combatente» y «Ceivar organiza los recibimientos a los presos cuando salen de la cárcel», les da apoyo dentro de prisión y asistencia jurídica en todo el proceso.
Para este funcionario, que ha comparecido en calidad de testigo, no hay duda de que Causa Galiza «legitima todos los medios de lucha, legales o ilegales, para conseguir la independencia de Galicia», ya así estaría plasmado en todos los documentos intervenidos durante la intervención, que él se encargó de analizar como experto en Inteligencia.
En cuanto a Ceivar, ha vinculado a la organización a la creación del Colectivo de Presos Independentistas Gallegos (CPIG), que si bien ha aclarado que no solo estaba conformado por reos de Resistencia Galega sí estaba «copado» por ellos o por «gente que ha empezado a atentar o cometer acciones a partir de 2005», cuando aparece el primer manifiesto de la organización terrorista.
A este respecto, ha explicado que el CPIG funciona con una gran «disciplina» que vendría marcada por Ceivar, de modo que solo quienes siguen sus directrices –por ejemplo, no aceptar beneficios penitenciarios individuales– reciben su apoyo en asistencia jurídica, económico con ingresos mensuales y de «solidaridad» con marchas a cárceles. Aquellos que se desmarcan de la línea fijada, ha aseverado, dejan de percibir la ayuda de Ceivar.
SUCEDÁNEO DE AMI
Además, ha continuado, «estaban planteándose, ya que AMI (organización juvenil dedicada a captar combatientes para Resistencia Galega) se había disuelto, formar una nueva organización juvenil y una coordinadora independentista que coordinara las tres organizaciones para que la unidad de acción estuviera garantizada».
El investigador ha indicado que precisamente ese sucedáneo de AMI cerraría el «círculo». «Tenemos un frente de masas, que aglutina a todo el independentismo radical gallego, una organización de apoyo a presos, un colectivo de presos, una organización juvenil (…) y luego el frente armado, que es Resistencia Galega», ha expuesto.
«Eso nos llamó la atención, porque era todo un conglomerado que daba una legitimación y un soporte al empleo de la violencia en Galicia para conseguir la independencia», ha destacado.
A preguntas de las defensas, el investigador ha precisado que Causa Galiza y Ceivar no tenían vínculos oficiales entre ellas, sino que el vaso comunicante era la «multimilitancia» de sus miembros.
No obstante, otro investigador que también ha testificado este miércoles ha reconocido la dificultad de probar la militancia en estas entidades porque, según ha comentado, se encargaron de que fuera «opaca». «No había carnés», ha apostillado.
DÍA DA GALIZA COMBATENTE
Por otro lado, un historiador que intervino en una conferencia celebrada el 9 de octubre de 2015 con motivo del Día da Galiza Combatente ha refutado la versión sobre el origen histórico de tal celebración que dio en la sesión del martes un investigador.
El historiador ha sostenido que los festejos se hacen por el 11 de octubre de 1072. «Es un acto en el que la sociedad gallega recuerda unos hechos históricos y les otorga un significado. Igual que en Madrid el 2 de mayo», ha señalado.
En cambio, dicho investigador afirmó que el Día da Galiza Combatente es por el 11 de octubre de 1991, cuando murieron ‘Lola’ y ‘Pepe’, dos terroristas del Exército Gerrilheiro do Povo Galego Ceive, al estallar el artefacto explosivo que estaban colocando en una discoteca de Santiago de Compostela, lo que dejó un tercer muerto y más de 50 heridos.
Interrogado por las defensas, el historiador ha declarado que en el acto del 9 de octubre de 2015 no hubo alusiones ni a los dos terroristas ni al Ejército Guerrillero ni a Resistencia Galega.