Diez de los doce independentistas gallegos que están siendo juzgados esta semana en la Audiencia Nacional por «ensalzar» y «justificar» el ideario de Resistencia Galega se han declarado inocentes, negando cualquier violencia en los actos en los que participaron. En concreto, uno de ellos, que pertenece a Ceivar, se ha desvinculado de la organización terrorista y de sus dirigentes.

En la primera sesión del juicio, celebrada este lunes, han intervenido nueve miembros y simpatizantes de Causa Galiza –Juan José Pérez Lorenzo, Salvador Gómez Crespo, José Antonio Fernández, Óscar Gómez, Borja Mejuto, Enrique Torres, José Antonio González Maceiras, Antón Arias e Isabel Iglesias–, en relación con los actos celebrados en 2014 y 2015 con motivo del 11 de octubre, Día da Galiza Combatente, y Uxio Caamaño, integrante de Ceivar y representante del Colectivo de Presos Independentistas Gallegos (CPIG).

La Fiscalía reclama para ellos penas de entre cuatro y doce años de cárcel por delitos de integración en una organización criminal para la comisión de delitos de enaltecimiento de una organización terrorista y enaltecimiento del terrorismo, aunque en uno de los acusados solo aprecia enaltecimiento del terrorismo, y pide también que se disuelvan las dos entidades independentistas.

Caamaño, que estuvo preso en dos ocasiones (entre 2005 y 2008, y entre 2009 y 2011) por delitos de daños como destrucción de cajeros automáticos, según ha declarado, ha reconocido que participó en varios actos de recibimiento de presos gallegos, incluidos dos en homenaje a él mismo y otros celebrados para Antón Santos Pérez y Héctor José Naya Gil, alias ‘Koala’, ambos miembros de Resistencia Galega.

En el caso de Santos Pérez, Caamaño ha admitido que pronunció un discurso en el acto de homenaje, pero ha rechazado cualquier vínculo terrorista. «Él nunca dijo ser miembro (de Resistencia Galega), ni en Ceivar admitimos la tesis de que fuera miembro de Resistencia Galega, ni tampoco que existe una organización armada en Galicia llamada Resistencia Galega», ha dicho.

En cuanto al homenaje a ‘Koala’, Caamaño ha querido matizar que solo intervino como público. Interrogado por el fiscal sobre si desplegó una pancarta con el lema ‘Libertad para los presos independentistas’, ha contestado que no lo recuerda pero que «es probable». «El recibimiento se dio cuando fue absuelto de todas las acusaciones, es decir, cuando era un hombre inocente», ha apostillado.

Asimismo, Caamaño ha afirmado –en contra del Ministerio Público– que un acto de homenaje al que asistió en 2011 era también para él mismo, aseverando que «no guardaba ninguna relación» con los dirigentes de Resistencia Galega Antonio García Matos, ‘Toninho’, y María Asunción Losada Camba, ni con Santiago Vigo Dominguez, otro miembro de la organización terrorista. Interrogado por el fiscal sobre ellos y José Manuel Sánchez Gorgas, otro miembro, se ha limitado a describirlos como «gallegos independentistas».

CEIVAR Y RESISTENCIA GALEGA

En todo momento, Caamaño, acusado de un delito de integración en organización criminal y de cuatro de enaltecimiento del terrorismo con una petición total de doce años de cárcel, ha negado la relación de Ceivar con Resistencia Galega, sosteniendo que se trata de un grupo dedicado a dar apoyo moral, social y jurídico a los miembros del CPIG e incluso a presos de otras partes del mundo que habrían visto vulnerados sus derechos.

«El cometido de Ceivar es la defensa de los derechos civiles y políticos de los gallegos, pero sobre todo de los que están implicados en la lucha política y son perseguidos por motivos políticos», y particularmente a las personas encarceladas porque «son los que han visto vulnerados sus derechos con mayor brutalidad y frecuencia», ha explicado.

Preguntado directamente por Fiscalía si entre los presos a los que Ceivar da apoyo hay miembros de Resistencia Galega, ha contestado que la organización independentista ofrece su «asesoramiento y solidaridad» a «todas las personas encarceladas por motivos políticos». «No juzgamos los actos por los que están encarceladas», ha sostenido, esgrimiendo que independientemente de por qué estén entre rejas «merecen ser defendidas».

Posteriormente, y respondiendo a su abogado, ha calificado de «disparate» la afirmación de que Ceivar tiene una inclinación especial hacia los presos de Resistencia Galega y otros condenados por delitos violentos. Según Caamaño, la entidad independentista «se ocupa con equidistancia de presos o acusados de todo tipo».

Además, ha aprovechado para denunciar que «en Galicia existe persecución política a una parte de la población, y muy marcadamente al independentismo», y ha reivindicado que «la solidaridad con las personas perseguidas es una virtud humana». «Para mí, desde luego, es una obligación moral, ética y política», ha remachado.

ACTOS AUTORIZADOS

Tanto Caamaño como los otros nueve acusados que han declarado este lunes –miembros o simpatizantes de Causa Galizia– han contado que los actos en los que participaron habían sido comunicados previamente a la Delegación o a la Subdelegación del Gobierno y que se desarrollaron sin altercados, recalcando que había presencia policial pero que los agentes no tuvieron que intervenir.

Así, Pérez Lorenzo, al que la Fiscalía acusa de un delito de integración en organización criminal y cuatro delitos de enaltecimiento del terrorismo, por los que pide que cumpla doce años de prisión, ha definido el Día da Galiza Combatente como una ocasión para «recordar hechos de nuestra historia» a favor de su «soberanía política».

Causa Galiza, ha expuesto, es «una plataforma amplia a favor de la soberanía nacional, de los derechos de determinación de Galicia, en la que estaban integradas multitudes de organizaciones políticas, sociales y personas a título individual».

Tras la primera sesión del juicio, han quedado pendientes las declaraciones de dos de los doce acusados, así como de peritos y testigos. Están programadas nuevas sesiones para el martes y miércoles.