Trabajadores de Alcoa y de las empresas auxiliares intensifican sus protestas este martes después del fracaso de la venta de la planta de Cervo (Lugo) y tras la mesa de negociación con la empresa, que pretende aplicar un expediente de regulación de empleo frente a la aspiración del comité, Xunta y Gobierno central, que aspiran a una nueva ampliación del plazo para que sea la SEPI la que adquiera la factoría.
Empleados de las compañías exteriores han retomado las movilizaciones a primera hora de este martes y en torno a las 10,00 horas se ha sumado parte de la plantilla de la fábrica de Alcoa en A Mariña de Lugo.
Concentrados a la entrada de la planta, han colocado una serie de neumáticos con los que han hecho arder el cartel de la compañía a las puertas de las instalaciones.
«No ha habido acuerdo, no han querido entrar a valorar la última advertencia de la Xunta para que paralicen el proceso para intentar llegar a un acuerdo con la SEPI», lamentaba el presidente del comité, José Antonio Zan, a última hora del lunes, cuando todavía no había finalizado la reunión que la empresa convocó en Nigrán, a unas tres horas de San Cibrao.
Al respecto, Zan insistió en que fue «increíble» lo que pasó «con las propuestas de la empresa, incluida una que le hizo a la SEPI y ya hablaba la empresa unilateralmente del ERTE o del ERE cuando no se negoció en esta mesa».
En este escenario, el comité de Alcoa en A Mariña ha convocado una asamblea para abordar la nueva situación frente a los locales de los sindicatos a las 13,00 horas de este martes.