El alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, ha hecho este lunes un llamamiento a la «responsabilidad de todos» ante el inicio del curso académico esta semana, después de que las autoridades municipales denunciasen 20 fiestas en pisos entre la noche del viernes y la del sábado.
En la rueda de prensa posterior a la reunión de la junta de gobierno local, el regidor ha dicho que la semana que comienza representa para la capital gallega «un gran reto», que es la vuelta a las clases tanto en la universidad –desde este lunes– como en Educación Secundaria y Formación Profesional –este miércoles–.
En este sentido, Bugallo ha dicho que Santiago «se juega» durante los primeros 15 y 21 días del curso el poder reducir las restricciones sanitarias que mantiene la ciudad «o si, por el contrario, es necesario ampliarlas». «Todo va a depender de lo que suceda en estas dos o tres primeras semanas», ha augurado.
Ante la llegada de miles de estudiantes universitarios durante los últimos días, el alcalde de Santiago les pide que piensen «en sí mismos» pero también en «sus familias y terceras personas» antes de cometer actuaciones «irresponsables».
«UN INCREMENTO NOTABLE» DE FIESTAS
Seguidamente, ha dado el dato de que entre el viernes y el sábado «se denunciaron 20 fiestas en pisos», una decena cada día, lo que supone «un incremento notable» debido, según ha comentado, a que los locales de hostelería cierran antes –como muy tarde, a la 1,00 de la mañana– y «hay quien no se resiste a dar la fiesta por acabada».
Por eso, ha advertido que la Policía Local tramitará «todas las denuncias, sea por botellón o por otros incumplimientos de la normativa». No en vano, Bugallo ha avanzado que se entrevistará con el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, para poder contar con la «colaboración» de la Policía Nacional en esta labor.
«Dentro de nuestras posibilidades y capacidades, estaremos absolutamente atentos para tramitar todas las denuncias», ha insistido el regidor compostelano, para a renglón seguido solicitar la «colaboración de todos», tanto de estudiantes como de familias, vecinos, centros y universidades.
Y es que los factores de riesgo «no van a estar en el centro», ha continuado Bugallo, sino «después»: «En las actividades de socialización, fiestas, botellones, etcétera».