La firma de moda Bimba y Lola registró en el primer semestre del año una reducción en sus ventas del 39,1%, lo que ha achacado al cierre de sus establecimientos por la pandemia de COVID-19.
Fuentes de la empresa han detallado que la situación epidemiológica conllevó el cierre obligatorio de los 277 puntos de venta de los que dispone la marca en los distintos países en que los opera.
Por otra parte, el crecimiento del canal digital de la firma de moda se aceleró hasta alcanzar una subida del 86,2% durante el periodo en el que las tiendas físicas permanecieron cerradas.
Además, la empresa ha destacado que las ventas de sus tiendas han mostrado una evolución positiva cada mes desde su reapertura. No obstante, ha reconocido que el impacto y los riesgos de la pandemia sobre el sector todavía son muy importantes.
Por este motivo, el grupo se ha centrado en realizar una rápida adaptación a la nueva situación del mercado y en continuar su plan estratégico. De este modo, aspira a que Bimba y Lola se consolide como una marca global de referencia en su segmento.