El colectivo de mariscadores de la Ría de Ferrol ha protestado este jueves ante los edificios de la Xunta para reclamar al Gobierno gallego y al Estado que aporten una solución para que estos profesionales puedan optar a ayudas ante un posible paro biológico o cese de actividad por la la aparición del parásito perkinsus, que ha dejado sin producto a estos profesionales dedicados a la recolección de almeja.
Allí se han dado cita representantes y socios socios de las cofradías Santiago Apóstol de Barallobre, en Fene (A Coruña) , y de Mugardos (A Coruña), que comparten zona de trabajo en la ría de Ferrol. La patrona mayor de la Cofradía de Pescadores y Mariscadores de Ferrol, Isabel Maroño, ha advertido que en caso de cese «se quedarían más de la mitad de los asociados fuera de las prestaciones», y ha lamentado que se pasen «la pelota entre administraciones» ante este «grave problema».
Isabel Maroño ha detallado que en la actualidad de su cofradía hay trabajando unas 70 o 80 personasen la recolección de la almeja, «cuando hace tres años eran tranquilamente unos 150 los mariscadores».
«Solo podrían entrar muy pocos socios, ya que en el primero de los casos solo entraría el 5% de cada cofradía, mientras que en el caso del cese de la actividad, con la normativa que nos ponen, nos pasa lo mismo, con lo que se quedan fuera muchos socios, algo a lo que no estamos dispuestos», ha añadido el patrón mayor de la Cofradía Santiago Apóstol de Barallobre, Jorge López.
López ha advertido de la posibilidad de irse «todos para casa sin ninguna prestación por el cese definitivo», salvo que Consellería do Mar vele por ellos. «En vez de tanta promesa, que se vean más hechos», ha sentenciado.