La Diputación de Pontevedra ha puesto a disposición de los ciudadanos 13 rutas autoguiadas que se pueden seguir a través de aplicaciones móviles o del GPS en diferentes puntos de la provincia, con el fin de «darla a conocer».
En un comunicado, ha indicado este jueves que las fichas de los itinerarios, que aparecen clasificados por la Diputación, están en el sitio web del ente provincial (www.depo.gal). En las mismas se da información sobre la distancia, la dificultad, las altitudes y los protocolos en caso de accidente.
Las rutas recorren zonas de los ayunamientos de Moraña, Forcarei, O Gove, Redondela, Pontevedra, Catoira, Lalín, Vigo, O Rosal, Mondariz, Mondariz-Balneario, Silleda, Oia, A Guarda, Cangas y Bueu. Entre las opciones están la ruta de Muíñoz do Vento-Torres do Oeste, en Catoira, que es circular y tiene una longitud de 14,64 kilómetros.
Otras propuestas son más cortas, como el sendero del Lérez en Forcarei, de siete kilómetros, y la ruta de Muíños do Picón e do Folón, en O Rosal, que es un recorrido circular del 3,5 kilómetros en la que se pueden ver estas estriucturas, declaradas bien de interés cultural (BIC).
Estas rutas autoguiadas son, junto con la iniciativa Deporienta, una de las novedades de Vive Deporte, la programación deportiva de la Diputación, que desarrolla entre julio y septiembre una treintena de actividades.
Por otra parte, la Diputación ha informado de que un total de 2.780 personas visitaron desde enero el Pazo de Liñares, en Lalín, en donde se puede ver la exposición ‘Pegadas na paisaxe. O patrimonio do Deza’. La muestra, que permanecerá abierta hasta el 6 de septiembre, acerca a la ciudadanía el patrimonio arqueológico de la provincia.
Del total de visitantes, 1.811 vieron la muestra antes del estado de alarma y 969, desde finales del mes de mayo. Del total, 1.933 de las personas eran gallegas, mientras que 332 procedían de otras partes del Estado y 72, del extranjero.
Ente los elementos que despiertan «mayor interés», la Diputación ha destacado el suelo con 107 castros localizados, la pulsera de un esclavo africano encontrada en Silleda, un exvoto que data de la tradición milenaria del cultivo de miel y el hacha pulida de Agolada.